Además de daños al erario por 785 mdp, la ASF no encontró documentos a favor del ambiente en tramos 6 y 7
Ciudad de México (Marcrix Noticias).— La revisión a la Cuenta Pública del 2022 detectó posibles daños al erario por 785 millones de pesos en la construcción del Tren Maya y la falta de medidas de mitigación ambiental para los tramos correspondientes a Quintana Roo, informó la Auditoría Superior de la Federación (ASF), órgano de fiscalización presupuestal de la Cámara de Diputados.
Según la auditoría hubo pagos indebidos por 256 millones de pesos por concepto de bienes distintos a la tierra, pues esa cantidad se erogó sin contar con avalúos individuales con los que se comprobara qué elementos se pagaron y cómo se determinaron las cantidades de cada uno de ellos.
La ASF también reportó que el Gobierno de México compró terrenos equivalentes a 295 mil metros cuadrados en el tramo 6, encargado al Ejército, que no ocupará para la construcción del proyecto ferroviario en el sureste del país.
En el tramo 5 se detectó la falta de “acreditación de la garantía correspondiente a 14.4 por ciento por la ampliación del anticipo del Subtramo 1.
La ASF averiguó que en el Tramo 4, Izamal-Cancún, hubo pagos en exceso por 286 millones de pesos debido a la diferencia del costo en la integración de diversos precios unitarios, los cuales fueron analizados y recalculados por el Fonatur.
Para el tramo 6, Tulum-Chetumal, la Secretaría de la Defensa Nacional y Fonatur no acreditaron el Programa de Vigilancia Ambiental ni la documentación mediante la cual se llevaron a cabo las medidas de mitigación, ni el proyecto ejecutivo y planos autorizados y firmados por las instancias competentes.
La ASF detectó que en el tramo 7, Chetumal-Escárcega, las autoridades no acreditaron las medidas de mitigación ambiental.
Con información de El Universal y El Financiero