La ceremonia ocurrió en San Pedro Cuitlapa y fue avalada por usos y costumbres de la comunidad, pese a estar prohibida por la ley.
Guerrero (Marcrix Noticias).- Una boda entre un adolescente de 13 años y una menor de 14, se celebró el pasado domingo 4 de mayo en la comunidad de San Pedro Cuitlapa, municipio de Tlacoachistlahuaca, Guerrero, lo que generó indignación en redes sociales y reavivó el debate sobre los matrimonios entre menores de edad en México.
Imágenes y videos difundidos muestran a los menores vestidos de novios, bailando el vals, compartiendo pastel y rodeados de decenas de invitados, en un evento que incluyó banquete, música en vivo y ambientación festiva. Incluso se observa al menor tomando una cerveza y besando a la niña.
De acuerdo con medios locales, la ceremonia fue organizada por las familias y presuntamente respaldada por autoridades locales, bajo la figura de “usos y costumbres”, práctica común en varias comunidades indígenas de la región de la Costa Chica.
Sin embargo, el Código Penal de Guerrero prohíbe expresamente el matrimonio infantil. Desde 2022, una reforma legal establece sanciones a quienes promuevan, faciliten o permitan este tipo de uniones, las cuales vulneran los derechos de niñas, niños y adolescentes.
Organismos defensores de la infancia han señalado que estas uniones, aunque simbólicas o no reconocidas legalmente, pueden tener efectos graves en la salud física y emocional de los menores, además de interrumpir su educación y perpetuar ciclos de pobreza y desigualdad.
Internautas criticaron duramente la celebración, al considerar que normaliza la violencia infantil y pone en riesgo el bienestar de los menores. “No es una tradición, es una violación a sus derechos”, señalaron usuarios en redes.
Según datos del Gobierno federal, el matrimonio infantil persiste sobre todo en zonas rurales e indígenas del país, donde se mantiene como una práctica cultural, económica o religiosa, a pesar de las leyes que lo prohíben.
En muchos casos, afecta de manera desproporcionada a niñas y adolescentes, quienes son las principales víctimas de esta forma de violencia estructural.
Indignación en redes por boda infantil en Guerrero.
Natalia y Miguel, de solo 12 años, fueron casados con autorización de sus familias en San Pedro Cuitlapan.
El caso ha encendido el debate sobre los derechos de la infancia y el matrimonio forzado. pic.twitter.com/znLvcg1Yqj— Puebla (@PueblaenLinea) May 6, 2025