El sismo golpeó las provincias de Samangan y Balkh, dañó edificios históricos como la mezquita azul de Mazar-i-Sharif y agravó la crisis humanitaria que atraviesa el país.
Kabul, Afganistán, (Marcrix Noticias). — Un terremoto de magnitud 6.3 sacudió durante la madrugada de este lunes el norte de Afganistán, dejando al menos 20 muertos y más de 300 heridos en las provincias de Samangan y Balkh, según reportaron autoridades locales.
El movimiento telúrico ocurrió alrededor de la 01:00 hora local (20:30 GMT del domingo), con epicentro en el distrito de Kholm, provincia de Samangan, y una profundidad de 28 kilómetros, de acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Sharafat Zaman, portavoz del Ministerio de Salud afgano, informó que “alrededor de 320 compatriotas fueron heridos y más de 20 murieron”, aunque advirtió que las cifras son preliminares debido a que continúan las labores de rescate y la evaluación de daños en zonas rurales.
El sismo provocó daños estructurales severos en varios edificios, entre ellos la mezquita azul de Mazar-i-Sharif, una joya arquitectónica del siglo XV considerada uno de los monumentos más emblemáticos del país. Uno de sus minaretes colapsó tras el impacto. Autoridades locales restringieron temporalmente el acceso a la prensa en el área afectada.
El Ministerio de Defensa desplegó equipos militares para despejar carreteras bloqueadas por deslizamientos de tierra y rescatar a personas atrapadas durante la madrugada. Sin embargo, la falta de infraestructura y las deficientes redes de comunicación en las zonas montañosas del norte dificultan las labores de emergencia.
El norte de Afganistán se encuentra sobre una de las regiones sísmicamente más activas del mundo, cerca de la cordillera del Hindu Kush, donde convergen las placas tectónicas euroasiática e india. Según el British Geological Survey, desde 1900 se han registrado al menos 12 terremotos superiores a magnitud 7 en el noreste afgano.
En agosto pasado, otro sismo de magnitud 6 causó más de 2,200 muertes en las provincias de Kunar, Laghman y Nangarhar, mientras que en 2023, un terremoto en la región de Herat dejó 1,500 fallecidos y destruyó unas 63,000 viviendas.
La ONU y organismos humanitarios advirtieron que el país enfrenta una situación de emergencia prolongada: a la alta frecuencia de desastres naturales se suman el colapso económico, la sequía y la inseguridad alimentaria, factores que han profundizado la crisis humanitaria desde el regreso de los talibanes al poder en 2021.
