Dos sujetos acusados de secuestro y crimen organizado votaron por la Presidencia de la República rodeados de policías y encadenados.
México (Marcrix Noticias)-En un evento sin precedentes, dos presos de alto peligro del penal estatal de Barrientos, en el Estado de México, emitieron su voto para la Presidencia de la República, mientras estaban encadenados y esposados, bajo la vigilancia de al menos una decena de guardias. Este hecho ocurrió dentro del marco del proceso electoral que permitió que 30,391 presos de 215 cárceles federales y estatales ejercieran su derecho al voto entre el 6 y el 20 de mayo.
A pesar de la singularidad del momento, el proceso no fue secreto. Los reclusos, acusados de secuestro y crimen organizado, fueron rodeados por tres guardias mientras emitían su voto en una mampara. La actividad se desarrolló rápidamente, y en menos de dos minutos, los presos fueron nuevamente esposados y encadenados antes de ser escoltados fuera del auditorio.
En el caso del penal del Altiplano, conocido por su alta peligrosidad, los 118 presos en prisión preventiva que votarán por la Presidencia de la República lo harán de manera individual y en un periodo de dos días. Joaquín Rubio, vocal ejecutivo del INE en el Estado de México, explicó que esta medida se implementa debido a la peligrosidad de los reclusos y que se llevará a cabo durante el próximo sábado y domingo.
A pesar de las restricciones, algunos presos expresaron su satisfacción por haber tenido la oportunidad de participar en el proceso electoral. Uno de ellos, Néstor, confesó su indecisión al enfrentarse a la boleta electoral y destacó la importancia de que los candidatos cumplan con sus promesas, especialmente en materia de justicia y empleo.
Por su parte, Griselda, una presa en el penal de Barrientos, manifestó sentirse contenta y tomada en cuenta al participar en el proceso electoral. Ambos expresaron la esperanza de que el próximo presidente implemente reformas que agilicen los procesos judiciales y garanticen la justicia para aquellos que están en prisión preventiva.
El proceso electoral en las cárceles contó con el apoyo del INE, que proporcionó las facilidades necesarias para que los presos ejercieran su derecho al voto, incluyendo la posibilidad de tramitar su credencial de elector desde la cárcel. Sin embargo, se impidió la presencia de observadores y representantes de partidos políticos durante la votación.