Sin justicia a dos años de sufrir abuso sexual y acoso laboral por parte de un superior en 2022 cuando era policía municipal.
Chihuahua (Marcrix Noticias)- Cristina Fabiola Carrillo denunció haber sido víctima de abuso sexual y acoso laboral por parte de un superior en 2022 cuando era policía municipal de Chihuahua.
Sin embargo, en lugar de obtener justicia y un proceso con perspectiva de género, desde entonces, ha enfrentado revictimización, indiferencia institucional y una negativa judicial a procesar a su agresor pese a las pruebas.
Hoy, Fabiola señala que vive con secuelas físicas y emocionales, sin acceso a justicia ni pensión por riesgo laboral, mientras su agresor sigue activo y protegido por autoridades.
Cristina Fabiola Carrillo sirvió como policía municipal por casi tres décadas en las que portó el uniforme hasta que fue víctima de una agresión sexual por parte de uno de sus superiores y luego de acoso laboral.
A más de dos años de la agresión y de haber denunciado los hechos, Fabiola no ha obtenido justicia; por el contrario, sólo ha obtenido revictimización, incredulidad y autoridades judiciales que ni siquiera dieron apertura a su caso por las vías judiciales, pues una Juez local determinó que no vincularía a proceso a su agresor; mientras que ella, denuncia que vive con miedo, encerrada, enferma, medicada, incapaz de volver a su trabajo porque ahí sigue el hombre al que denunció por acoso sexual.
“Fui acosada sexual y laboralmente en el año 2022 por mandos de Seguridad Pública. No recibí apoyo de las instituciones municipales. Nunca me creyeron, a pesar de que yo tengo dos periciales que muestran el daño que tengo a raíz del problema que me sucedió dentro de Seguridad Pública”, relató en entrevista con Sin Embargo.
La ex agente no exige privilegios, sólo pide que le crean para acceder a la justicia: que su caso sea tomado en serio, que su agresor sea procesado y sancionado.
También exige la pensión que le corresponde tras 18 años de servicio y por el colapso emocional provocado en su lugar de trabajo, que ha derivado en una enfermedad que sigue agravándose. No obstante, le han negado ese derecho con el argumento brutal de que, para recibir el 100 por ciento, debió ser acosada por toda la corporación y no sólo por un policía.
“Es el doctor Esparza, de Medicina Laboral, que dijo (que mi incapacidad) no era riesgo de trabajo. De hecho, una vez me acompañó una licenciada a una cita con él y él nos dijo que, para que fuera riesgo de trabajo, tendría que haberme acosado toda la corporación, no nada más un elemento. Entonces él también, pues siempre que voy me dice: ‘Ay, mija, no es para tanto; se me hace muy raro que usted esté pasando por esto, si hay muchas compañeras y nomás usted’. O sea, me hace preguntas que, pues, no le competen”.
Carrillo Gutiérrez insistió en que sólo pide que alguien, al menos una vez, la escuche sin poner en duda su palabra. “Hago un llamado para que me ayuden realmente que me ayuden, porque mire, desde que yo hice público mi caso, ninguna institución me ha ayudado, nadie me ha brindado apoyo, y aquí en la lucha”, agregó en entrevista.
Fuente: Sin Embargo.