Los 133 cardenales han iniciado el proceso de votación en la Capilla Sixtina, para elegir al nuevo Papa tras la muerte de Jorge Bergoglio.
Ciudad del Vaticano (Marcrix Noticias).- Este miércoles 7 de mayo comenzó oficialmente el cónclave en el Vaticano para elegir al nuevo Papa, sucesor de Jorge Bergoglio, el papa Francisco, fallecido recientemente a los 88 años.
A las 16:30 horas, tiempo de Roma (8:30 am en la Ciudad de México), los 133 cardenales electores iniciaron una solemne procesión desde la Capilla Paulina hacia la Capilla Sixtina, entonando la Letanía de los Santos y el himno latino Veni Creator Spiritus , pidiendo inspiración divina para la elección del pontífice número 267 de la Iglesia católica.
Una vez dentro, los cardenales juraron mantener absoluto secreto sobre las deliberaciones del cónclave.
Luego, el maestro de ceremonias litúrgicas, arzobispo Diego Ravelli, pronunció la tradicional frase en latín Extra Omnes (“¡Fuera todos!”), marcando la salida de toda persona ajena al proceso y el cierre oficial de las puertas de la Capilla Sixtina.
A partir de ese momento, los cardenales quedaron completamente incomunicados: sin teléfonos, sin acceso al exterior y bajo estrictas medidas de confidencialidad.
El secretario de Estado, Pietro Parolin, fue quien presidió la oración inicial, ya que el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re, supera los 80 años y no puede participar en la votación.
Se prevé que este mismo miércoles se lleve a cabo la primera votación, aunque el Vaticano ha advertido que, en caso de no haber consenso, la tradicional fumata blanca (señal de que ya hay Papa) podría tardar más de un día.
Si no se alcanza la mayoría necesaria de 89 votos (dos tercios), saldrá humo negro desde la chimenea especial instalada sobre la Capilla Sixtina.
Entre los favoritos para asumir el pontificado se encuentra el italiano Pietro Parolin, de 70 años, quien fue durante años el segundo al mando en el Vaticano bajo el pontificado de Francisco.
Este proceso de elección, uno de los más reservados y ceremoniales del mundo, continuará con hasta cuatro votaciones por día (dos por la mañana y dos por la tarde) hasta que se logre un acuerdo y la Iglesia católica tenga nuevo líder espiritual.
El cónclave es seguido de cerca por católicos de todo el mundo, que esperan con esperanza y ansiedad el nombramiento de quien liderará la Iglesia católica en tiempos de retos y cambios globales.