La mezcla de alcohol y bebidas energéticas podría tener efectos graves en la salud, por lo que buscan erradicar su venta y consumo.

Estado de México (Marcrix, Noticias).- Los azulitos, una popular bebida alcohólica preparada con vodka y bebidas energéticas de color azul, podrían estar cerca de ser prohibidos en el Estado de México. 

La diputada María José Pérez Domínguez de Morena presentó una iniciativa en el Congreso del Estado para regular su venta, argumentando que su consumo presenta serios riesgos para la salud, especialmente entre los jóvenes.

Los azulitos, también conocidos en algunos lugares como “Pitufos” por su distintivo color azul, han ganado popularidad en los últimos años debido a su sabor dulce y energético, lo que los convierte en una opción atractiva en fiestas y reuniones sociales. 

Sin embargo, esta mezcla de alcohol y bebidas energizantes ha generado preocupación en las autoridades sanitarias debido a sus efectos adversos.

La iniciativa busca modificar las leyes locales para aplicar sanciones a los establecimientos que sigan vendiendo esta bebida. 

De aprobarse, los negocios que comercialicen azulitos podrían enfrentarse a suspensiones o cancelaciones de licencia. Esta medida se propone en respuesta a los graves problemas de salud que podrían derivarse de su consumo habitual, particularmente entre los jóvenes.

El riesgo principal de esta mezcla radica en los efectos que pueden tener tanto el alcohol como las bebidas energéticas en el organismo. Según un estudio de la Universidad Internacional de La Rioja, combinar alcohol con energizantes puede aumentar el riesgo de intoxicación hepática y otros problemas relacionados con el sistema nervioso central.

El consumo de bebidas energéticas puede enmascarar los efectos del alcohol, haciendo que las personas beban más de lo que su cuerpo puede soportar sin notar los efectos de la intoxicación. 

Esto puede resultar en síntomas graves como taquicardia, hipertensión, dolores de cabeza intensos, vómitos y dilatación de las pupilas, lo que puede llevar a intoxicaciones graves, incluso fatales.

Por otro lado, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) ha alertado sobre el alto contenido de azúcar en los azulitos, lo que, combinado con el alcohol, podría contribuir al desarrollo de enfermedades crónicas como obesidad, diabetes y trastornos metabólicos. 

En 2022, el ISSSTE reportó un incremento alarmante en los casos de diabetes, con un total de 1 millón 145 mil 180 casos de diabetes mellitus en adultos mayores de 20 años, un aumento del 11.2% en comparación con el año anterior.

Preocupación por el consumo juvenil

Los azulitos se han convertido en una bebida de moda entre los jóvenes, quienes buscan experimentar con nuevas mezclas alcohólicas. La tendencia a consumir esta bebida ha crecido en los últimos años, especialmente en reuniones sociales y fiestas nocturnas, lo que ha llevado a las autoridades a considerar su prohibición.

El alto contenido calórico de esta mezcla, que puede alcanzar hasta 728 kilocalorías por litro, es otro factor preocupante. En su comunicado, el ISSSTE destacó que el consumo excesivo de azulitos podría acelerar el desarrollo de enfermedades como la diabetes, hipertensión y afecciones hepáticas.

¿Qué son los azulitos?

Los azulitos son bebidas que se caracterizan por su color vibrante y su sabor dulce, resultado de la combinación de vodka y bebidas energéticas. Aunque algunas versiones omiten las bebidas energéticas, la receta más popular incluye este ingrediente, que contiene taurina, un aminoácido relacionado con efectos secundarios cuando se mezcla con alcohol. Además de la taurina, las bebidas energéticas suelen contener cafeína y azúcar, lo que contribuye a su alto contenido calórico.

A pesar de los riesgos, los azulitos siguen siendo una de las bebidas más populares en bares y fiestas, especialmente entre los jóvenes que buscan bebidas divertidas y visualmente atractivas. Sin embargo, las autoridades han comenzado a tomar medidas para prevenir los daños a la salud pública, y esta iniciativa en el Congreso del Estado de México es sólo el comienzo.

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