El año 2024 será recordado como un hito sombrío en la historia del cambio climático: el año más cálido jamás registrado, afirma la Organización Meteorológica Mundial .
México (Marcrix Noticias)-El año 2024 será recordado como un hito sombrío en la historia del cambio climático: el año más cálido jamás registrado. Este periodo ha estado marcado por temperaturas globales sin precedentes, fenómenos meteorológicos devastadores y un alarmante estancamiento en los esfuerzos internacionales por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la NASA y la NOAA, el promedio global de temperatura superó el umbral de 1,5 ºC sobre los niveles preindustriales, impulsado por el fenómeno de El Niño y el continuo aumento de emisiones de CO₂. Este año, la concentración de dióxido de carbono alcanzó las 422 ppm (partes por millón), un 50% más que en 1750, destacando el impacto humano en el sistema climático.
Los océanos, que absorben el 90% del calor adicional generado por los gases de efecto invernadero, registraron temperaturas récord. Este calentamiento extremo no solo ha intensificado tormentas y huracanes, sino que también ha acelerado el deshielo en los polos, contribuyendo al aumento del nivel del mar a un ritmo alarmante. Más de la mitad de los glaciares del mundo han sufrido pérdidas masivas de masa este año.
El 2024 ha estado plagado de fenómenos climáticos extremos:
- Sudamérica sufrió una sequía prolongada, afectando comunidades rurales y urbanos.
- Asia y América del Norte enfrentaron ciclones y lluvias torrenciales, causando destrucción masiva y desplazamiento de poblaciones.
- Las olas de calor, más frecuentes e intensas, dejaron miles de víctimas en Europa, África y otras regiones vulnerables.
A pesar de la urgencia, la comunidad internacional sigue sin alcanzar acuerdos efectivos. La COP29, celebrada este año, arrojó pocos avances significativos, y las emisiones globales continúan en aumento. Esto resalta una desconexión preocupante entre la gravedad de la crisis climática y las acciones políticas necesarias para mitigarla.
El 2024 no solo refleja el impacto acumulado del cambio climático, sino que también subraya el desafío de actuar en un tiempo limitado para evitar consecuencias irreversibles. El próximo decenio será decisivo, y las naciones deben redoblar esfuerzos para reducir emisiones, proteger a las comunidades vulnerables y transformar los sistemas energéticos.
El calentamiento global ya no es una advertencia futura; es una realidad presente. Lo que hagamos ahora definirá si el mundo puede garantizar un futuro sostenible para las próximas generaciones.