- Generaron en 2023, mil 089 millones de dólares, los 64 mil 939 STR en Quintana Roo.
- Ha obtenido ganancias por 363 millones de dólares en Cancún, Isla Mujeres y Puerto Morelos
Cancún, Marcrix Noticias.- En los últimos cuatro años, es decir, de 2019 a 2023, los cuartos de hotel crecieron 5.1% en Quintana Roo, mientras que en el mismo periodo las habitaciones para hospedaje temporal informales (STR) se dispararon en un 12.5%, generando una competencia desleal con quienes si cumplen con las leyes en vigor.
De acuerdo a un estudio realizado por la Asociación de Hoteles de Cancún, Isla Mujeres y Puerto Morelos, la Universidad Anáhuac campus Cancún y la Asociación “Sustainable Tourism Advanced Research Center”, en Quintana Roo, esta modalidad informal de rentar propiedades privadas, casas o departamentos de manera temporal ha generado ganancias por el orden de más/menos Mil 089 millones de dólares, en los poco más de 64 mil 939 negocios particulares de este tipo.
Este segmento de economía informal, que no paga ningún tipo de impuestos ha obtenido ganancias durante 2023 por encima de los 363 millones de dólares en solo tres destinos: Cancún, Isla Mujeres y Puerto Morelos.
Los cuartos ofrecidos en esta modalidad de alojamiento equivalen ya a la mitad de la oferta formal de Quintana Roo, es decir, STR cuenta con 64 mil 939 vs 130 mil 123 cuartos de hotel en la industria hotelera en los 11 municipios.
Sin duda, el explosivo crecimiento de las STR es un fenómeno que no ha sido atendido por la autoridad causando perjuicio a la industria hotelera, tanto de México como de Quintana Roo, ya que no tramitan licencias de funcionamiento; operan sin respetar el uso de suelo; el pago de los servicios públicos lo hacen como viviendas y no como negocios; hay riesgos en perjuicio del consumidor que pudiera ser timado; nadie vigila los probables incumplimientos legales y viola totalmente las leyes General de Turismo y la General de Protección al Consumidor.
Lo peor de esto, que no ha buscado ser regulado en México, es que las STR pertenecen en su mayoría a empresas multinacionales que no tributan en al país y que operan digitalmente evadiendo todo tipo de impuestos y sin ofrecer garantías a los turistas.
El estudio señala que la competencia en actividades de mercado como el alojamiento, es saludable porque genera beneficios para los consumidores, sin embargo, cuando esa se produce en un entorno en que una parte de los actores no cumple con las reglas del juego, el riesgo de una erosión de los beneficios de los consumidores es una realidad; ya que afectan al destino turístico en su conjunto “devaluándolo”.
Asimismo, en las conclusiones del estudio de las STR se señala que debe prevalecer una óptica en la que estas viviendas o departamentos habilitados como cuartos de hospedaje, deben ser reconocidas como un negocio, paraque tributen y se convierta en una prestación de servicios turísticos con las obligaciones que ello conlleva y ser incluidos en el Registro Estatal de Turismo.
Se concluye que existe una clara tendencia mundial por regular de manera más estricta la operación de las STR y se cita como ejemplo de ello a la Ley 18 de Nueva York que obliga a los anfitriones a registrarse y ser aprobados por el ayuntamiento; de igual forma, limita la estancia a un mínimo de 30 días de sus turistas, lo que propiciaría un espacio de competencia justa.