Colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, dio a conocer que en el rancho Izaguirre se traficaba con órganos humanos.
Jalisco (Marcrix Noticias)- Indira Navarro, lideresa del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, dio a conocer detalles sobre el funcionamiento del rancho Izaguirre, utilizado para entrenamiento y exterminio de personas, en donde también existió el tráfico de órganos humanos, torturas y otras violencias.
La líder del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco reveló que una sobreviviente presenció la venta de órganos y los castigos severos que se llevaban a cabo en el rancho Izaguirre, que incluían un corral con cerdos.
La madre buscadora siguió diciendo que su fuente le confesó que en el rancho se realizaban experimentos médicos y traficaban con los órganos de las personas privadas de su libertad.
Navarro enfatizó que las personas llegaban ahí a través de engaños y de falsas promesas de empleo, aunque contó que – según María – algunos eran llevados ahí por encargo; esto por presuntas represalias contra personas con las que el grupo criminal llegaba a tener roces.
De igual manera, la testigo habría asegurado que menores de edad también eran llevadas al Rancho Izaguirre, esto para realizar actos de abuso sexual y tráfico de órganos.
María también habría contado sobre un presunto corral de cerdos a donde eran enviados los reclutas que no podían cumplir con sus entrenamientos.
Ahí, las personas eran atacadas por los animales, quienes pasaban semanas sin comer y los devoraban en cuestión de minutos.
La madre buscadora añadió que María le habló sobre peleas en lodo como método de castigo y le explicó que todos los reclutas eran obligados a dormir hacinados.
Cada día siguen saliendo a la luz más noticias escalofriantes en cuanto a éste rancho. Y las atrocidades vividas ahí, se exige que las autoridades hagan justicia y detengan a todos los responsables de estas acciones así lo ha manifestado la ciudadanía.
El rancho Izaguirre se ubica en la localidad de La Estanzuela, municipio de Teuchitlán, donde operaba un crematorio clandestino y se habrían cometido otras actividades ilícitas, como el tráfico de órganos.
El sitio, conocido como rancho Izaguirre, fue localizado por el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco el pasado 5 de marzo, tras una llamada anónima, y ya había sido intervenido por las autoridades estatales en septiembre de 2024.
Sin embargo, según denunció el colectivo, en aquella intervención no se documentaron ni aseguraron los hornos crematorios ni los restos humanos, a pesar de las evidencias que ahora han salido a la luz.
Información revelada por autoridades y el colectivo señalan que en el predio utilizado como campo de exterminio y centro de reclutamiento fueron hallados tres hornos crematorios subterráneos, restos óseos, ropa, maletas, credenciales, zapatos, casquillos, y estructuras utilizadas para adiestramiento armado.
De acuerdo con la líder de Guerreros Buscadores de Jalisco, Indira Navarro, esta historia de horror empieza a raíz de las múltiples desapariciones de jóvenes registradas en la central de autobuses: “Ofrecían una buena paga, 5.000 pesos a la semana, por ser guardia de seguridad, chófer… pero siempre los citaban en la central. Ahí los interceptaban y ya no se sabía nada”, dijo.
Fuente: Noticias México y Aristegui Noticias.
