Los seis sacerdotes fueron enviados a la Santa Sede; activistas acusan aumento en las detenciones de religiosos católicos.
Nicaragua (Marcrix Noticias)-El gobierno de Nicaragua ha confirmado el destierro de siete sacerdotes católicos nicaragüenses, quienes han sido trasladados a Roma, Italia, según una breve declaración emitida a través del portal oficialista El 19. Los sacerdotes, que permanecían bajo vigilancia o retención policial desde principios de agosto, fueron recibidos por la Santa Sede, aunque el gobierno nicaragüense no ofreció detalles adicionales sobre las circunstancias de su salida.
El destierro de estos sacerdotes ha generado conmoción en Nicaragua, especialmente en el ámbito mediático. Según el medio crítico del gobierno, Confidencial, los siete sacerdotes expulsados son Edgar Sacasa, Ulises Vega, Marlon Velázquez, Víctor Godoy, Harvin Torres, Jairo Pravia y Silvio Romero, quienes pertenecían a las diócesis de Estelí y Matagalpa. Organismos de derechos humanos reportan que estos religiosos habían sido detenidos o mantenidos bajo vigilancia en sus hogares o parroquias desde el 1 de agosto.
La represión contra la Iglesia católica en Nicaragua ha aumentado significativamente desde la rebelión social de abril de 2018, cuando el presidente Daniel Ortega acusó a los obispos de participar en un supuesto golpe de Estado fallido, orquestado por la oposición con el apoyo de Estados Unidos. Hasta la fecha, se estima que 46 religiosos han sido expulsados del país, y más de 60 sacerdotes y monjas han sido forzados al exilio o se les ha impedido regresar tras haber salido por razones laborales o de salud.
La diócesis de Matagalpa ha sido una de las más afectadas por esta represión. Monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, se convirtió en una figura prominente en este contexto tras ser encarcelado durante un año bajo cargos de conspiración y terrorismo, y posteriormente desterrado al Vaticano junto a otros 18 religiosos.
El gobierno de Nicaragua no ha emitido más comentarios sobre la situación de otros seis sacerdotes de estas mismas diócesis, que según reportes, aún no han sido localizados.