Habitantes del municipio promovieron un amparo para frenar la construcción de una casa de descanso para militares de alto rango junto a la Laguna de los Siete Colores; el juez federal otorgó suspensión provisional.

Bacalar, Q. Roo (Marcrix Noticias).— Un juzgado federal ordenó detener las obras de una casa de descanso para personal de alto rango de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), actualmente en construcción en la zona costera de Bacalar, al conceder una suspensión provisional tras un juicio de amparo promovido por habitantes del municipio.

El recurso legal, promovido ante el Juzgado Primero de Distrito, quedó asentado en el expediente 241/2025, en el cual se ordena detener temporalmente cualquier acción de destrucción, modificación o alteración en el área comprendida entre la Avenida Uno (costera) y las calles 20 y 22 de la Colonia Centro.

“Las autoridades señaladas como responsables, Secretaría de la Defensa Nacional y Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, suspendan temporalmente, hasta que se decida sobre la suspensión definitiva, la destrucción, modificación y/o alteración acontecida en la zona…”, dicta el acuerdo judicial.

Construcción sin permisos ambientales

La Sedena inició la obra en marzo sin contar con los permisos de impacto ambiental necesarios. La edificación, ubicada a orillas de la Laguna de los Siete Colores, provocó protestas ciudadanas, lo que motivó la presentación del amparo.

Además, la suspensión provisional impide que se entreguen licencias de construcción adicionales para esta obra hasta que el juez emita una resolución definitiva.

Riesgo ambiental en la laguna

El juzgado también ordenó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) verificar si las acciones realizadas por la Sedena, como la extracción de agua y lodo, así como la edificación de estructuras, pueden generar daños al ecosistema de la Laguna Bacalar, especialmente a las especies que habitan en ella.

La resolución definitiva sobre la suspensión se definirá este miércoles, mientras diversas organizaciones civiles preparan nuevas acciones legales en defensa del medio ambiente y el uso sostenible de esta zona natural.

Bacalar, considerado un polo turístico de alto valor ecológico, enfrenta constantes presiones por desarrollos inmobiliarios y turísticos sin regulación ambiental adecuada.