La iglesia católica acusó que el caso del obispo emérito de Chilpancingo, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza se usa con motivaciones políticas y es blanco de descalificaciones y conjeturas.
En vista de la polémica que rodea al jerarca católico – quien pasó de ser víctima de una supuesta desaparición a encontrarlo en condiciones de aturdimiento al interior de una habitación de un motel en Cuernavaca por consumo de cocaína – los obispos católicos exigieron a las autoridades una investigación “ecuánime” que lleve a la justicia.
La demanda de la iglesia católica fue difundida este domingo alrededor de las siete de la mañana a través de un video en el que a nombre de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro aseguró que se hacen “conjeturas a la ligera” respecto de lo que le pasó a su colega, Salvador Rangel, quien por ciento “se mantiene impedido” para rendir declaración.
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En estos tiempos de noticias falsas y polarización, lamentamos profundamente que se hagan conjeturas a la ligera sobre la aparición de monseñor Salvador Rangel, ya que lejos de aclarar confunden a la gente de buena voluntad y dañan la integridad de quien por el momento está impedido para compartir su experiencia. Esta situación ha tomado un giro de instrumentación política que está lejos de buscar la verdad y la justicia”.
El videomensaje difundido a los medios de comunicación comenta que “eventualmente” se le aplicarán las reglas del derecho canónico al obispo, quien desde hace tiempo promueve treguas con integrantes del crimen organizado para alcanzar la paz en el estado de Guerrero.
Una vez que monseñor Rangel tenga la capacidad de declarar, lo haremos de forma institucional y tengan la seguridad que, eventualmente según nuestra normativa canónica, se habrá de actuar en consecuencia. Exhortamos a las autoridades competentes a realizar una investigación exhaustiva, objetiva, imparcial, ecuánime y esclarecedora que contribuya a la justicia para que sea a partir de la investigación y de la aportación de pruebas que se juzguen los hechos”, puntualizó el secretario general del Episcopado Mexicano.
De acuerdo con monseñor Castro Castro, desde la iglesia católica mexicana se deplora “el uso de prejuicios y descalificaciones expresadas en medios sociales que solo contribuyen a enrarecer el ambiente en el que está inmersa la sociedad mexicana, herida por la polarización extrema que no contribuye a hacer valer los más altos principios de convivencia que deseamos todos los mexicanos “.
Finalmente, el obispo de Cuernavaca agradeció las muestras de apoyo y solidaridad expresadas en favor de la salud del obispo de Chilpancingo.