Édgar Damián Sandoval Albarrán, presunto miembro de Guerreros Unidos y figura clave en la desaparición de los 43 normalistas, fue entregado por autoridades de Estados Unidos.
Ciudad de México, (Marcrix Noticias)- — La Fiscalía General de la República (FGR) informó la extradición a México de Édgar Damián Sandoval Albarrán, alias “La Rana” o “El Wereke”, presunto implicado en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa ocurrida en 2014. La entrega fue coordinada con Interpol México y tuvo lugar en la frontera de Nogales, Sonora, luego de su detención el pasado 9 de junio en Estados Unidos por su estancia ilegal.
La FGR había solicitado su detención provisional con fines de extradición, al identificarlo como integrante del grupo criminal Guerreros Unidos, el cual tuvo un papel central en los hechos ocurridos en Iguala, Guerrero.
Implicación en el caso Ayotzinapa
Según las investigaciones oficiales, “La Rana” es considerado una pieza clave en la ejecución y ocultamiento del crimen. Testigos protegidos e integrantes del mismo grupo delictivo señalan que participó en el traslado de restos calcinadosdesde el basurero de Cocula hasta el río San Juan, donde habrían sido arrojadas bolsas con cenizas humanas.
Uno de los jefes de sicarios, apodado “El Cepillo”, aseguró en declaraciones que Sandoval Albarrán fue quien condujo la camioneta usada para el traslado de los restos, presuntamente bajo instrucciones de altos mandos criminales, en un intento por eliminar toda evidencia.
Su nombre apareció desde los primeros informes de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), aunque errores en la identificación llevaron inicialmente a la detención de un inocente. Fue la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) la que, años después, confirmó su verdadera identidad mediante tatuajes y rasgos físicos, reforzando su vínculo directo con el caso y debilitando la versión oficial conocida como la “verdad histórica”.
La extradición ocurre en un contexto de renovadas investigaciones y esfuerzos institucionales por esclarecer a fondo los hechos de Ayotzinapa, un caso que ha sido símbolo de impunidad, corrupción y colusión entre autoridades y crimen organizado.
Con la llegada de Sandoval Albarrán al país, la FGR espera fortalecer nuevas líneas de investigación, incluyendo el esclarecimiento del paradero de los estudiantes y la responsabilidad de los autores intelectuales y materiales.