La Cámara de Diputados aprobó una reforma que prohíbe la aplicación, inyección o infiltración hipodérmica de sustancias nocivas, tóxicas o peligrosas para la salud con supuestos fines estéticos.
El dictamen -que se avaló por unanimidad- modifica la Ley General de Salud y fue enviado a los senadores para continuar ahí con el proceso legislativo.
“Para los efectos de esta ley, se consideran dispositivos médicos con fines estéticos los materiales, sustancias o productos similares que tengan como finalidad modificar la anatomía, adelgazar, engrosar, aumentar el volumen, modificar, cambiar, corregir o variar el contorno, la forma o las proporciones de los labios, mejillas, mentón, senos, glúteos, brazos, piernas u otras zonas o regiones del rostro y del cuerpo humano”, se detalla en la minuta.
Queda prohibido el uso de silicona líquida, aceites minerales, aceites comestibles, aceites de automóvil, grasas vegetales o animales, cemento óseo, biopolímeros orgánicos o sintéticos o cualquier otra sustancia no apta para uso humano mediante aplicación por medio de procedimientos quirúrgicos, invasivos o no invasivos a través de inyección, infiltración hipodérmica o algún otro procedimiento innovador de sustancias modelantes no absorbibles o no biodegradables, nocivas o tóxicas que dañen, afecten, lesionen o pongan en peligro tejidos, órganos, extremidades o sistemas del cuerpo de las personas de forma temporal o permanente”, se precisa.
De ser aprobada en el Senado, esta reforma permitiría imponer de cinco a ocho años de prisión a quien realice las citadas aplicaciones. Esto significa que las sustancias modelantes con fines estéticos podrán utilizarse bajo autorización sanitaria y sólo por profesionales en el campo de la medicina.
Al presentar el dictamen ante el pleno, la diputada María Clemente García (Morena) se refirió a un trabajo de investigación que revela que el 40 por ciento de los pacientes que recurrieron a estas sustancias desconocía la cantidad o el rango de la cantidad infiltrada,
La ignorancia y el desconocimiento de la farmacocinética y la fisiopatología de este tipo de sustancias por personal no médico, sin escrúpulos y pacientes que crean en falsas expectativas y tratamientos estéticos aparentemente mágicos y sencillos favorecen que siga presente esto en el medio médico que puede llevar a la muerte”, expuso la legisladora
Detalló que actualmente en México 923 mil personas buscan anualmente este tipo de procedimientos, es decir, 2 mil 500 personas diarias, de las cuales 80 por ciento son mujeres.