El empresario inmobiliario, Francisco Pérez, acusado de fraude de más de 200 millones de pesos, en Playa del Carmen, fue detenido tras permanecer prófugo por más de 8 meses.
Tulúm (Marcrix Noticias).- Francisco Pérez Lobato, un conocido empresario inmobiliario y exdirector jurídico de Gigante Grupo Inmobiliario, fue arrestado en Tulum, Quintana Roo, después de estar prófugo durante más de ocho meses.
La detención se dio en el marco de una investigación por un fraude millonario relacionado con el complejo residencial de lujo SÚUT en Playa del Carmen.
Pérez Lobato, que operaba a través de la empresa Desarrollos Turísticos LT, es acusado de desviar más de 200 millones de pesos, destinados al desarrollo de este complejo habitacional.
De acuerdo con las autoridades, el empresario utilizó indebidamente un crédito de 90 millones 600 mil pesos, otorgado para la construcción del proyecto, además de desviar recursos obtenidos de la preventa de los 91 departamentos que conformarían el lujoso complejo.
El fraude, que ha dejado pérdidas significativas tanto a clientes como a instituciones financieras, fue denunciado por los compradores de los departamentos y la institución bancaria que otorgó el crédito.
Gabriel Castañeda, abogado de los denunciantes y socio de la firma Nassar Nassar y Asociados, reveló que durante el tiempo en que Pérez Lobato y su hijo Ian Pérez López administraron el proyecto, se realizaron transferencias y depósitos millonarios que, según se investiga, fueron utilizados para adquirir propiedades de lujo y bienes familiares, en lugar de ser invertidos en la construcción del complejo.
El proyecto, que prometía ser un ícono de lujo en la Riviera Maya, permanece abandonado. Ninguno de los departamentos ha sido entregado y las estructuras del complejo están en deterioro. Las ventanas rotas por huracanes, la humedad y el desgaste por el paso del tiempo son visibles, evidenciando el abandono de la obra.
La detención de Francisco Pérez Lobato fue posible gracias a la colaboración entre las autoridades de Quintana Roo y la Ciudad de México.
El empresario fue aprehendido el 26 de noviembre y trasladado a la fiscalía estatal para enfrentar las acusaciones en su contra. Sin embargo, su hijo, Ian Pérez López, continúa prófugo y es buscado por las autoridades.
Mientras tanto, los afectados por el fraude, incluidos los compradores y la institución financiera, exigen la devolución de su dinero y justicia por el daño ocasionado.
La constructora encargada del proyecto, Carsa, se deslindó de la responsabilidad, afirmando que no tiene relación con Pérez Lobato desde hace más de seis meses.
Con información de Excelsior.