El Ejército y la Guardia Nacional desmantelan un laboratorio con capacidad para producir 6 millones de dosis de metanfetamina, representando una pérdida millonaria para el crimen organizado.

 

Guanajuato (Marcrix Noticias).- Un operativo coordinado entre el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional resultó en el aseguramiento de un narcolaboratorio en el municipio de Acámbaro, Guanajuato, donde se decomisaron 3.6 toneladas de metanfetamina (crystal), la mayor incautación de este tipo en la región. 

Las autoridades estiman que este golpe representa pérdidas millonarias para el narcotráfico, calculadas en 3 mil 219 millones de pesos.

Según el coronel Guillermo Robles Pérez, el laboratorio, ubicado en la comunidad de Andocutín, tenía la capacidad de producir hasta 6 millones de dosis de metanfetamina en un periodo de entre 30 y 40 días. 

El decomiso de la droga es el más grande registrado en Guanajuato desde el aseguramiento de casi cuatro toneladas de metanfetamina y más de dos toneladas en estado líquido en 2022.

El informe oficial detalló que en el narcolaboratorio de Acámbaro fueron encontrados los siguientes materiales:

  • 3,625 kilos de metanfetamina
  • 975 kilos de sosa cáustica
  • 350 kilos de ácido tartárico
  • 40 litros de carbonato de calcio
  • 5 reactores
  • 12 condensadores

Estos ingredientes son fundamentales para la producción de la droga sintética, cuyo impacto en las finanzas del crimen organizado es significativo. Las autoridades estiman que la cantidad decomisada podría haber generado ganancias multimillonarias para los cárteles operativos en la región.

Aunque aún no se ha confirmado el grupo exacto detrás de la operación, se presume que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) podría estar involucrado, debido a la ubicación estratégica del laboratorio en la frontera entre Guanajuato y Michoacán, dos estados clave en la lucha por el control del narcotráfico.

Esta región es especialmente importante para los cárteles debido a su proximidad con las rutas que conectan los puertos de Lázaro Cárdenas (Michoacán) y Manzanillo (Colima) con las fronteras de Nuevo León y Tamaulipas, áreas cruciales para el tráfico de drogas hacia los Estados Unidos. Se presume que el CJNG, junto con otros grupos como el Cártel de Sinaloa y el Cártel del Golfo, también tienen presencia en la zona, generando disputas por el control del territorio.

Con información de Excelsior.

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