La crisis del limón en Quintana Roo se agrava por precios mínimos, falta de acopio y abandono a productores.

La sobreoferta, intermediarios y caminos deteriorados hunden a productores rurales; cientos de toneladas se desperdician.

 

Chetumal (Marcrix Noticias).- El estado de Quintana Roo registra una producción anual de cerca de 49 mil toneladas de limón persa, con más de dos mil productores dedicados al cultivo en municipios del sur como José María Morelos, Othón P. Blanco y comunidades aledañas. Sin embargo, la sobreoferta, sumada al arribo de limones de otros estados del país, ha saturado el mercado local, dejando al limón quintanarroense prácticamente sin salida.

Productores como Aquilino Martínez Delgado han denunciado que la única vía para colocar su cosecha es vendérsela a intermediarios conocidos como “coyotes”, quienes pagan apenas 60 pesos por caja de 33 kilogramos, es decir alrededor de 1.81 pesos por kilo —un monto que no alcanza a cubrir los costos de producción.

Según denuncian los agricultores, esta dinámica persiste por la falta de centros de acopio, mercados formales o compradores directos, lo que los obliga a aceptar precios que califican como “regalados”.

La crisis ha alcanzado tal magnitud que, en lugares como el ejido Morocoy, con cerca de 600 hectáreas sembradas de limón, productores han tenido que desechar una parte significativa de su producción. Se calcula que hasta el 70% de la fruta se pierde o se pudre por no hallar mercado.

Uno de los productores que dialogó con medios locales afirmó: “Nos está matando que meten limones de otros estados y aquí tenemos mucho producto… pero nadie lo compra.”

La falta de caminos en buen estado —vías sacacosechas deterioradas— encarece el transporte del fruto y complica el acceso a las parcelas. Esta carencia estructural también impide la llegada de compradores formales o empresas interesadas en adquirir el cítrico.

Hasta ahora, los campesinos aseguran que las solicitudes de apoyo para rehabilitar caminos o levantar centros de acopio no han sido atendidas, lo que prolonga una situación de abandono que data de años.

Frente a estas condiciones, los productores han hecho un llamado urgente al gobierno estatal y federal. Exigen la creación de centros de acopio, rutas de comercialización dignas, infraestructura para transporte y planes de apoyo estructural que les permitan vender su producto a precios justos.

 

¿Cuánto cuesta producir limón en México?

 

A nivel nacional, producir una hectárea de limón implica una inversión que puede ir de decenas a más de cien mil pesos anuales, considerando labores agrícolas, fertilización, control de plagas y mantenimiento de huertos. En distintos estados productores, incluso precios de 8 pesos por kilo se consideran insuficientes para cubrir estos costos. En Quintana Roo, sin embargo, los agricultores del sur reciben apenas 1.81 pesos por kilo, una cifra que coloca a la actividad en un nivel de pérdida permanente.

El desbalance entre los costos reales de producción y los precios de venta explica por qué, pese a que la entidad genera más de 49 mil toneladas al año, la actividad citrícola no representa ingresos sostenibles para las familias rurales. Con estos márgenes, los limoneros no solo dejan de recuperar su inversión: también deben enfrentar gastos adicionales derivados de caminos en mal estado, largas distancias hacia puntos de venta y la falta de infraestructura que permita almacenar o clasificar el producto.

Productores consultados señalan que esta situación ya no puede considerarse un problema temporal del mercado, sino una crisis estructural que se repite cada ciclo agrícola. Sin centros de acopio, sin compradores formales y con intermediarios imponiendo precios mínimos, la producción local pierde valor desde el origen. A esto se suma la entrada de limón procedente de otros estados, que desplaza aún más la oferta local y profundiza el abandono del campo en el sur de Quintana Roo.

 

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