Trump ordena anular todas las órdenes ejecutivas firmadas por Biden con “autopen”
El presidente Donald Trump declaró este 28 de noviembre de 2025 que revoca todas las órdenes ejecutivas y demás documentos firmados por Joe Biden mediante un “autopen” (firma mecánica), argumentando que esos instrumentos carecen de validez
Estados Unidos. (Marcrix Noticias).- Trump indicó en un mensaje en su red social que todo documento firmado por “autopen” durante la administración de Biden queda “anulado y sin efecto”.
Dijo que ese método —según su versión— fue usado sin autorización directa de Biden, lo que a su juicio invalida muchas de las decisiones del gobierno anterior.
Aunque no presentó evidencia pública para respaldar sus afirmaciones, aseguró que responsabiliza al “entorno” de Biden por el uso del autopen, y advirtió sobre posibles cargos de perjurio.
Contexto previo y relevancia institucional
Esta medida no es la primera ofensiva de Trump contra las políticas de Biden: el día de su toma de posesión en 2025 firmó una orden que ya revocaba decenas de decretos y memorandos de la administración previa.
Entre los cambios ya implementados figuran la eliminación de normativas ambientales, de programas de inclusión (DEI), regulaciones sobre salud reproductiva, control de AI, y ciertas políticas de inmigración.
Al plantear que todas las órdenes firmadas con autopen son inválidas, Trump busca invalidar no una selección, sino de facto una gran parte del legado legal de Biden, lo que podría generar un choque institucional sobre la validez de decisiones previas.
Implicaciones y debate
Legalmente, el uso del autopen en documentos presidenciales es reconocido en EE. UU. como una práctica habitual —incluyendo para leyes, decretos, memorandos— siempre que el presidente lo autorice. Algunos analistas advierten que invalidar masivamente esas firmas podría sentar un precedente inédito.
Politicamente, la medida profundiza la división entre los partidarios de Trump y los de Biden, y podría generar incertidumbre sobre acciones previas —desde regulaciones ambientales hasta decisiones de política migratoria, de salud o defensa.
No hay, al momento de los anuncios, una postura pública formal de Biden o de su equipo que contradiga o confirme las acusaciones de uso masivo del autopen.