Un total de 22 estados de Estados Unidos han presentado una demanda contra el estado de Nueva York, argumentando que su nueva ley climática, el Climate Change Superfund Act, es inconstitucional.

New York (Marcrix Noticias)-Un total de 22 estados de Estados Unidos han presentado una demanda contra el estado de Nueva York, argumentando que su nueva ley climática, el Climate Change Superfund Act, es inconstitucional. Esta normativa obliga a las principales compañías de combustibles fósiles a aportar 75,000 millones de dólares en los próximos 25 años para financiar un fondo destinado a cubrir los daños derivados del cambio climático.

La demanda: ¿extralimitación del poder estatal?

El fiscal general de Virginia Occidental, JB McCuskey, encabeza la demanda y sostiene que la ley de Nueva York excede su autoridad estatal, lo que podría sentar un precedente peligroso. Los estados demandantes advierten que si esta legislación se mantiene, otras regiones podrían aplicar medidas similares, afectando la estabilidad de la industria energética y otros sectores económicos.

Impacto económico y argumentos en contra

Los opositores a la ley argumentan que responsabilizar a las petroleras por emisiones globales entre 2000 y 2018 es una estrategia injusta que ignora el papel clave del carbón, el petróleo y el gas en el desarrollo económico. También advierten que los costos adicionales podrían traducirse en un aumento en los precios de la energía, perjudicando a los consumidores y generando incertidumbre en el mercado.

Defensores: Una medida urgente ante la crisis climática

Por otro lado, los defensores del Climate Change Superfund Act aseguran que la ley es necesaria para afrontar el creciente impacto del cambio climático. Señalan que los desastres naturales, como huracanes, incendios forestales e inundaciones, han incrementado los costos para los gobiernos estatales y locales. La recaudación de este fondo permitiría financiar proyectos de infraestructura resiliente, como la modernización de alcantarillados y la construcción de defensas costeras.

Un precedente clave para la política climática en EE.UU.

El fallo de esta demanda podría marcar un hito en la regulación ambiental del país. Si Nueva York gana el caso, otros estados podrían seguir su ejemplo con regulaciones más estrictas sobre la industria de combustibles fósiles. Sin embargo, si la corte falla en contra de la ley, podría desalentar futuras medidas similares y limitar la capacidad de los estados para exigir responsabilidades a las grandes petroleras.

El caso sigue en desarrollo y podría convertirse en una de las batallas legales más importantes sobre cambio climático en Estados Unidos.