Donald Trump, confirmó la fecha para imponer aranceles a vehículos que ingresen a Estados Unidos, afectando a la industria automotriz y las relaciones con México.

 

Estados Unidos (Marcrix, Noticias).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó este viernes 14 de febrero que impondrá nuevos aranceles a los automóviles importados, los cuales comenzarán el 2 de abril de 2025. 

Esta medida es parte de su política arancelaria, que busca reorganizar las relaciones comerciales del país y proteger la industria estadounidense.

El mandatario estadounidense detalló que los aranceles impactarán principalmente a los vehículos que crucen las fronteras de EE. UU. 

Desde la Oficina Oval en la Casa Blanca, Trump aclaró que aunque originalmente pensó en implementar la medida el 1 de abril, optó por retrasarlo para evitar coincidencias con el Día de los Inocentes.

Con este anuncio, Trump continúa con su estrategia de imponer aranceles a diversas importaciones, lo que ya ha afectado a productos como el acero y el aluminio. 

Esta ola de impuestos afecta especialmente a fabricantes automotrices internacionales como General Motors, Ford, Nissan, Stellantis, Honda y Toyota, que deberán enfrentar costos más altos para sus vehículos exportados a EE. UU. desde México, lo que podría generar una desaceleración en las exportaciones y aumento de precios para los consumidores.

Además, Trump reveló que en su guerra comercial, se impondrán “aranceles recíprocos” a aquellos países que intenten aplicar tarifas a productos estadounidenses. 

Este tipo de medidas arancelarias también afectarán a economías emergentes como Brasil y Tailandia, cuyas altas tarifas protegen sus mercados locales.

El gobierno de Trump ha utilizado los aranceles como una herramienta para obtener concesiones políticas sobre temas como migración, seguridad fronteriza y el tráfico de drogas. 

También ha impulsado a las empresas a considerar reubicar sus operaciones dentro de EE. UU., una estrategia que podría modificar las dinámicas comerciales a nivel global.

En este contexto, México, que es uno de los principales socios comerciales de Estados Unidos, se verá afectado por estas tarifas, especialmente en la industria automotriz, que representa una parte significativa de las exportaciones mexicanas. 

Aunque las armadoras mexicanas dependen del mercado estadounidense, este nuevo entorno podría obligarlas a ajustar sus precios o incluso modificar sus estrategias de producción.

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