Estados Unidos (Marcrix Noticias)-Donald Trump calificó como un “avance significativo” la llamada telefónica que sostuvo este lunes con Vladimir Putin, en la que, según él, ambas partes acordaron iniciar negociaciones inmediatas para un cese del fuego en Ucrania.

Sin embargo, Rusia mantuvo su ofensiva militar, lanzando nuevos ataques aéreos sobre Kyiv, lo que refleja una interpretación muy distinta del Kremlin. Mientras Trump celebró el “tono y espíritu” del diálogo, Putin lo describió como una conversación “franca y significativa”, sin hacer concesiones ni modificar sus exigencias.

Durante una rueda de prensa, Trump dijo confiar en que Putin “está interesado en la paz”, aunque no mencionó los recientes ataques con drones y misiles rusos sobre territorio ucraniano. Añadió que las condiciones para un cese del fuego deberán ser negociadas directamente entre Rusia y Ucrania, excluyendo un rol de mediación directa por parte de EE. UU.

Putin, por su parte, tomó la llamada desde una escuela para niños superdotados en Sochi, pero no mostró señales de detener la ofensiva ni suavizar su postura.

Trump aseguró haber informado a líderes europeos como Emmanuel Macron, Ursula von der Leyen y Giorgia Meloni, así como al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, quien confirmó dos llamadas con el exmandatario en el mismo día.

Zelensky señaló que ya se estudian posibles sedes para una futura ronda de diálogo, incluyendo Turquía, Suiza y el Vaticano, donde, según Trump, el papa Francisco ha mostrado interés en acoger las conversaciones.

Antes del diálogo, desde Washington se discutía la posibilidad de aplicar nuevas sanciones contra Rusia si no se producía un giro en su política militar. No obstante, tras la llamada, Trump evitó mencionar cualquier medida coercitiva, enfocándose en potenciales beneficios económicos para Moscú si decide finalizar el conflicto.

Zelensky advirtió que la presión sobre el Kremlin debe continuar y llamó a reforzar las sanciones. Entretanto, los ataques rusos no cesan y, pese al optimismo mostrado por Trump, el terreno refleja una realidad mucho más tensa y distante de una paz inmediata.