La Secretaría de Salud de la Ciudad de México, informó la muerte de una adolescente de 16 años que permanecía hospitalizada.
Ciudad de México (Marcrix Noticias).– La Secretaría de Salud de la Ciudad de México confirmó el fallecimiento de una víctima más por la explosión de una pipa de gas ocurrida el pasado 10 de septiembre bajo el puente La Concordia, en la alcaldía Iztapalapa, con lo que suman 32 personas fallecidas a causa del siniestro.
La dependencia detalló que la víctima fue identificada como Tiffany Odette Cano González, de 16 años de edad, quien permanecía internada en el Instituto Nacional de Rehabilitación. Con su fallecimiento, el número de personas hospitalizadas se reduce a cinco.
“Hoy se reporta un lamentable fallecimiento. Hasta el momento, cinco personas permanecen hospitalizadas, 47 han sido dadas de alta y 32 han fallecido. Nuestra solidaridad y respeto están con cada una de las familias”, informó la Secretaría a través de sus redes sociales.
De los pacientes que aún reciben atención médica, dos son menores de edad: Isai Santiago Ramírez Cano, de 2 años, hospitalizado en el Hospital de Tacubaya, y Azulet Carrillo Matías, quien se encuentra en el Hospital Shriners for Children, en Galveston, Texas.
La niña Azulet es nieta de Alicia Matías, una de las víctimas cuyo caso se volvió viral por la gravedad de sus heridas y la solidaridad ciudadana que generó.
Actualización sobre el incidente en #Iztapalapa ❗️
️ Hoy se reporta un lamentable fallecimiento.
Hasta el momento, 5 personas permanecen hospitalizadas, 47 han sido dadas de alta y 32 han fallecido.
Nuestra solidaridad y respeto están con cada una de las familias. pic.twitter.com/ctpI6ZtuLW
— Secretaría de Salud Pública de la Ciudad de México (@SSaludCdMx) October 22, 2025
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México determinó que la falta de pericia del conductor y el exceso de velocidad fueron las causas que provocaron la explosión.
Según el informe, el vehículo circulaba a 44 kilómetros por hora, superando el límite permitido, lo que derivó en la pérdida de control y posterior fuga de gas que desencadenó la detonación.
En el siniestro, ocurrido el 10 de septiembre, decenas de personas resultaron heridas, varias viviendas fueron dañadas y múltiples vehículos quedaron calcinados.
Hasta la fecha, 47 personas han sido dadas de alta, mientras que las familias de las víctimas continúan recibiendo apoyo del Gobierno de la Ciudad de México.