Se rompió el cuello en la piscina de su casa, sus hijos la ayudaron y la ambulancia llegó a tiempo
Yorkshire, Inglaterra (Marcrix Noticias).– Gemma Allison, originaria de Yorkshire, Inglaterra, estuvo cerca de morir tras sufrir una fractura de cuello después de realizar un clavado en la piscina de su casa; por fortuna sobrevivió gracias a sus hijos, quienes presenciaron la cruda escena.
Los hechos ocurrieron en el verano de 2022, pero el caso tomó relevancia hace unos días cuando Gemma Allison declaró sobre lo ocurrido esa fatídica tarde de juegos junto a sus hijos, que en un abrir y cerrar de ojos se convirtió en una pesadilla.
Fractura y paro cardiaco
Gemma Allison cuenta que impactó su cabeza contra el fondo de la piscina en su último clavado y se fracturó una vértebra del cuello, lo cual provocó un paro cardiaco por lo que quedó boca abajo flotando en el agua. Esto hizo que le entrara líquido en los pulmones poniéndola al borde de la muerte.
Daisy (8 años) y Alfie (10 años) presenciaron todo y avisaron a su hermano mayor, Cameron (20 años), quien corrió para sacar a su madre del agua; después, los menores pidieron ayuda a sus vecinos y una ambulancia llegó hasta el lugar en menos de 10 minutos, clave para que pudiera sobrevivir.
Oportuna intervención
Tras su ingreso al hospital, los médicos pudieron restablecer a Gemma Allison del paro cardiaco que sufrió, además le retiraron el líquido de los pulmones y posteriormente la intervinieron quirúrgicamente para retirarle la vértebra fracturada y colocarle una placa.
No obstante, todo este proceso duró aproximadamente un mes y la rehabilitación se realizó en otro centro médico donde pasó alrededor de seis meses, aprendiendo nuevamente a caminar, comer, e ir al baño sola.
En sus primeras declaraciones, Gemma Allison recordó que lo último que recuerda fue que estaba jugando con sus hijos y cuando despertó tenía un tubo en la garganta y estaba luchando por su vida; reconoció que como adulta no debió realizar un clavado en una piscina tan poco profunda.
Lección aprendida y ejemplo
Ante lo anterior, aseguró haber aprendido la lección y señaló que espera que su caso sirva como ejemplo para que otras personas no sufran lo mismo que ella por una imprudencia.
Gemma Allison, tras este desafortunado accidente, perdió la fuerza del costado derecho de su cuerpo, además, está obligada a usar un aparato ortopédico en una de sus piernas y para poder desplazarse con mayor facilidad usa un scooter de movilidad.
Además, señaló que constantemente experimenta ardor, hormigueo y entumecimiento en las piernas, sin embargo, la mujer se encuentra positiva gracias al apoyo de sus hijos, quienes después de un año se deshicieron de la piscina de su jardín.