La gira por Sudamérica de la Selección Mexicana termina con una victoria ante El Porto y una derrota ante River Plate.
Argentina (Marcrix Noticias)- Culmina la gira de la Selección Mexicana por Sudamérica y el saldo terminó en una victoria frente a el Inter Porto Alegre de Brasil y una derrota de 2-0 frente al River Plate de Argentina.
Ante un estadio Monumental a su máximo esplendor y totalmente lleno, donde lo primero que enfrentó la Selección Mexicana fue abucheo cuando se entonó el Himno Nacional Mexicano, los juveniles de Javier Aguirre, que poco acostumbrado está a este tipo de ambientes, salieron temerosos a la cancha y a los pocos minutos recibieron el primer gol.
Sin embargo, a pesar de la falta de experiencia de los jóvenes mexicanos, enfrentando a un equipo rioplatense que se presentaba ante su gente y deseoso de lucir, supieron responder a las exigencias y no llevarse una goleada que por momentos parecía darse.
Apenas iniciaba el minuto 8 del encuentro, cuando en un tiro de esquina cobrado por Lanzini, el balón, tras una serie de rebotes con Pezzella, cayó a los pies de Giuliano Galoppo, quien sacó el fogonazo cruzado para vencer a Andrés Sánchez y poner el 1-0 en favor del River Plate.
Con el total dominio del encuentro, a los 33 minutos Borja encontró un balón dividido en los linderos del área, sacó el escopetazo y la mandó a la red ante el vuelo inútil de Andrés Sánchez.
Después de esto la Selección Mexicana fue más precavida, supo detener la embestida del cuadro argentina y evitar más daño en su portería, a pesar de haberse visto carente en el ataque.
Un 2-0 final en favor del River Plate que habla de lo rescatable de esta selección plagada de jóvenes, que alzan la mano para ser tomados en el resto del proceso del Tricolor y sus próximos encuentros.
Así, el arrejuntado ungido como Selección Mexicana cerró su gira por Sudamérica con la victoria sobre el Inter de Porto Alegre y este revés ante un piadoso River.
Nada mal para presentar un grupo de jóvenes improvisados en el selectivo mexicano.
Cierto, Ínter no contó con al menos seis o siete de sus habituales titulares, y llegaba de sus vacaciones.
River Plate había iniciado pretemporada con un 2-1 sobre la U. de Chile, y este martes en su Monumental jugó sin la dureza y rudeza con la que se presenta en el torneo argentino, y sin que el técnico Marcelo Gallardo consiga aún el acomodo final de sus piezas y refuerzos, tratando de limpiar el estercolero que dejó Martín Demichelis.
Pero Javier Aguirre había sido claro. Los resultados serían aleatorios. Quería ver de qué sustancia estaban hechos los convocados. Debió quedar satisfecho: ninguno encogió la patita, ni arredró ante adversarios con mayor recorrido.
Simplemente, River Plate se presentó con una base de jugadores con kilometraje internacional, con títulos nacionales, continentales, europeos y hasta mundiales. Los blasones de algunos de ellos rebasaban todos los que pudiera sumar el chamaquerío de Javier Aguirre, más allá de las edades de Jesús Gallardo y de Guillermo Martínez.
