En los últimos seis años casi la mitad de la población de Michoacán quedó sin acceso a la salud pública, según el Inegi.
Ciudad de México (Macrix Noticias).- En los últimos seis años, el número de michoacanos sin acceso a la salud pública creció de manera alarmante, alcanzando a casi la mitad de la población, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En 2018, el 21.2% de los habitantes no contaba con servicios médicos; para 2024, la cifra alcanzó 46.1%, lo que coloca a Michoacán con la tercera tasa más alta del país, solo detrás de Chiapas (61.3%) y Puebla (47.3%).
De acuerdo con el organismo, esta crisis deriva de la desaparición del Seguro Popular y la transición fallida al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que dejó a millones de personas sin certeza sobre qué institución les brindaría atención médica.
Axel González, coordinador de datos en la organización México, ¿cómo vamos?, explicó que “no hubo una transición adecuada entre las instituciones públicas de atención universal”.
“El Insabi se convirtió en una anécdota administrativa; nunca tuvo un adecuado alcance entre la población. Por eso desapareció y fue sustituido por IMSS-Bienestar, que apenas se está echando a andar”, señaló el especialista.
A esto se le suma que el 69% de la población ocupada en Michoacán trabaja en la informalidad, lo que complica el acceso a servicios médicos laborales y deja a miles de familias sin cobertura.
Inflación médica y desigualdad en el acceso a la salud
La falta de cobertura pública ha provocado que muchos michoacanos sin acceso a la salud pública recurran a servicios privados cada vez más caros.
Durante octubre, la inflación general en Michoacán fue de 3.8%, pero la inflación médica alcanzó casi 6%, según el Inegi. Los medicamentos cardiovasculares aumentaron 12.1%, los expectorantes 11.6% y los dermatológicos 10.4%.
Además, las consultas médicas privadas cuestan 8.6% más que el año pasado, lo que afecta gravemente a los 1.7 millones de habitantes que viven en pobreza laboral y no pueden cubrir el costo de atención.
Una brecha que sigue creciendo
González subrayó que esta situación “golpea con más fuerza a quienes han sido desplazados del sistema público, pues deben atenderse en instituciones privadas en un contexto de encarecimiento generalizado”.
La falta de cobertura médica y el aumento en los precios hacen evidente que los michoacanos sin acceso a la salud pública enfrentan una doble carga: menos atención y mayores costos.
