Ambientalistas destacan que Quintana Roo está en riesgo de sufrir una crisis hídrica debido a la sobreexplotación de los acuíferos.
Playa del Carmen(Marcrix Noticias).- En el marco de la inauguración de los viajes del Tren Maya de Cancún a Playa del Carmen, los ambientalistas alzaron la voz para manifestarse en contra de este proyecto de la Cuarta Transformación.
A las afueras de la Estación del Tren Maya en Playa del Carmen, los ambientalistas se plantaron para expresar todo el peligro que este proyecto representa.
Lo primero que pidieron a los empresarios y autoridades es entender que Quintana Roo no vive del turismo, pero sí de la naturaleza.
Indican que gracias a las bellezas naturales con las que cuenta el Caribe mexicano, es por lo que vienen los turistas al destino.
Sin embargo, mencionan que de continuar con proyectos que dañan al medio ambiente, dentro de poco tiempo se mermará a la naturaleza y el turismo dejará de venir
Por otra parte, los ambientalistas comentan que ellos no se oponían al Tren Maya, pero este no se hizo cómo debía de ser, y ahora está afectando a la selva.
Los ambientalistas comentan que el Tren Maya pudo correr por la carretera y no por la selva, pero los empresarios se opusieron y terminaron cambiando su ruta.
Todo esto pone a Quintana Roo al borde de una crisis hídrica, debido a la sobrexplotación y contaminación que existe sobre los acuiferos.
De hecho, hace unas semanas, los ambientalistas mostraron como en el Tramo 5 Sur del Tren Maya, hay un río de cemento que está contaminando los acuifros.
Motivo por el cual, reforzaron su lucha, pues aseguran que si no hacen algo pronto, en un futuro el problema será mayúsculo, y afectará no solo a quienes hoy en día habitan la región, sino también a los que no nace.
“Yo no tendría cara para en un futuro decirle a las nuevas generaciones, no hicimos nada para poner a salvo el agua”, señalaron.
Una de las cosas que son importantes de mencionar en el marco del arranque de las operaciones del Tramo 5 Norte del Tren Maya, es que en la parte Sur, un juez falló en contra del Jaguar Rodante y ordenó suspender las obras.
Pero, aún con la suspensión, los trabajos se siguen llevando a cabo, lo que ha causado una gran indignación entre la población, pero sobre todo entre los ambientalistas.