Un informe de la ONU revela que Irán ha intensificado el uso de tecnología de vigilancia y denuncias ciudadanas para identificar a mujeres que no cumplen con la norma del hiyab obligatorio.

 

Estados Unidos (Marcrix Noticias)-Esta semana, un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) expuso que el gobierno de Irán ha reforzado sus mecanismos de vigilancia para imponer el uso obligatorio del hiyab en espacios públicos. De acuerdo con la Misión Internacional Independiente de Investigación sobre la República Islámica de Irán, el país ha implementado nuevas estrategias tecnológicas, como el uso de drones y software de reconocimiento facial, para identificar a mujeres que desafían la norma.

El informe se publica tras determinarse que el gobierno iraní fue responsable de la ‘violencia física’ que provocó la muerte de Mahsa Amini en 2022, un hecho que generó protestas masivas en todo el país. A pesar de la persistencia de la desobediencia civil, las mujeres enfrentan cada vez mayores riesgos de ser detenidas y encarceladas.

Las autoridades han desplegado cámaras de seguridad en carreteras y espacios públicos, además de instalar software de reconocimiento facial en universidades como Amirkabir en Teherán. También se han implementado drones para supervisar desde el aire a quienes no portan el velo obligatorio.

Otra herramienta de control es la aplicación móvil ‘Nazer’, que permite a los ciudadanos denunciar a mujeres sin velo en vehículos de transporte público y privado. Según activistas, este sistema ha derivado en casos alarmantes, como el de una mujer que fue baleada en julio de 2024 tras recibir una advertencia y tratar de escapar de un control policial.

Aumento de la represión tras protestas por Mahsa Amini

La muerte de Mahsa Amini en 2022 marcó un punto de inflexión en la lucha contra las leyes del hiyab en Irán, provocando intensas protestas que dejaron más de 500 muertos y más de 22 mil detenidos. Aunque inicialmente las autoridades redujeron la presión sobre el uso del velo, en abril de 2024 reinstauraron medidas más severas bajo el denominado Plan Noor (‘Luz’).

Como parte de estas medidas, al menos 618 mujeres han sido detenidas en los últimos meses, de acuerdo con activistas de derechos humanos. Mientras tanto, sectores conservadores continúan presionando al gobierno para imponer sanciones aún más estrictas contra quienes desafían la normativa.

El endurecimiento de la vigilancia y la represión reflejan la creciente tensión en Irán, donde miles de mujeres siguen desafiando las leyes del hiyab, enfrentándose a un sistema cada vez más intrusivo y represivo.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

No puedes copiar el contenido de esta página