Tolimán, Querétaro. (Marcrix Noticias)-— El presidente municipal de Tolimán, Alejo Sánchez de Santiago, se encuentra en el centro de la controversia luego de que circulara en redes sociales una fotografía en la que presuntamente porta un reloj de la marca Rolex, valuado en más de 400 mil pesos.

La imagen, viralizada en plataformas como X (antes Twitter), generó numerosas críticas hacia el edil del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), cuestionando la congruencia entre su imagen pública y el aparente artículo de lujo.

“Fue un regalo de niños de primaria”

Cuestionado por medios locales, Sánchez de Santiago negó que se trate de un reloj de lujo, asegurando que desconoce la marca del objeto y que éste le fue obsequiado por alumnos de primaria como muestra de agradecimiento por el apoyo a traslados y eventos escolares.

“Fue un regalo de niños de primaria. No sé la marca del reloj, fue un presente y no tuve tiempo de ir (a verificarlo)”, declaró.

Añadió que no acostumbra usar objetos costosos ni aceptar regalos onerosos, y afirmó que el obsequio no estuvo condicionado ni representa un acto indebido.

Críticas por su salario

El alcalde ya había estado en el foco público anteriormente debido a su salario mensual, uno de los más altos entre los 18 municipios del estado de Querétaro. Aunque no se ha revelado la cifra exacta, el tema ha sido recurrente entre críticos y ciudadanos locales.

No obstante, Sánchez de Santiago ha justificado su percepción económica al afirmar que destina el 60 % de su salario a labores sociales, incluyendo el pago de la presidenta del DIF municipal, asegurando que solo utiliza el 40 % para gastos personales.

Transparencia en la mira

Hasta el momento, no existe ninguna acusación formal en contra del edil. Sin embargo, el incidente ha reabierto el debate en torno a la ética, transparencia y percepción pública de los funcionarios locales.

En redes sociales, la polémica continúa dividiendo opiniones. Mientras algunos usuarios exigen una revisión del patrimonio del alcalde y mayor claridad en el uso de recursos públicos, otros consideran que se trata de un tema menor o de una campaña de desprestigio.