El gobierno de Índira Vizcaino, en Colima, ha actuado con lentitud para apoyar a los afectados por el caos vial producido por una falla en la aduana y que mantiene a cientos de personas varadas.
Han tenido que ser diversos grupos de personas y ciudadanos, quienes se unieron para comprar bebidas y alimentos para llevarlos y repartir entre los afectados que se encuentran en el embotellamiento.
Con recursos propios, han llevado alrededor de 200 pizzas, comida, agua y líquidos para ayudar a los afectados.
Incluso el ayuntamiento de Manzanillo lleva comida, así como Protección Civil dará agua y atención médica, sin embargo, ha sido notoria la ausencia en las primeras horas del gobierno estatal.
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En la cuenta de X-Twitter del gobierno de Colima, tampoco se observa información de apoyo respecto al suceso que ha dejado a familias enteras detenidas en las interminables filas.
Mientras tanto, es la propia sociedad civil, principalmente, la que busca aliviar las dificultades que enfrentan los operadores de camiones de carga y las familias atrapadas en el tráfico, ofreciendo apoyo humanitario y logístico en esta situación complicada.