Está bajo protección de la Guardia Nacional
Ciudad de México (Marcrix Noticias).— El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó la conferencia matutina de este jueves desde el búnker del otrora Centro de Inteligencia de la Policía Federal inaugurado en noviembre de 2009 por el gobierno del presidente Felipe Calderón.
Esa construcción fue valuada en tres mil 346 millones de pesos, según la secretaria de Seguridad Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
Los periodistas que cubren las conferencias matutinas tuvieron la oportunidad de recorrer las instalaciones.
“Hoy, la Guardia Nacional está encargada de estas instalaciones y se ha migrado hacia otros espacios las labores de inteligencia del gobierno mexicano. Ese no es el ejemplo que queremos para la estrategia de seguridad del Estado mexicano, esos tiempos quedaron atrás”, afirmó la funcionaria federal.
Rodríguez aseguró que el megaproyecto no alcanzó su objetivo de integrar los sistemas nacionales en una sola base de datos y tampoco hubo confianza de parte de las Fuerzas Armadas para mandar la información, pues ahí están los centros de datos de las operaciones del pasado reciente.
La realidad es que “este espacio era usado principalmente para que García Luna invitara a personajes de la vida pública, política, para demostrar la supuesta fuerza de inteligencia y el trabajo de la Policía Federal. Llenaron este centro de pantallas para apantallar”, explicó.

Las instalaciones consisten en tres niveles subterráneos en los que se ubicaron módulos de seguridad, operaciones, alertas nacionales e instalaciones estratégicas con generación de energía, planta de reciclado de agua y clima propios.
Fueron equipadas con sistemas informáticos supuestamente conectados a más de 600 puntos en el país y 169 sedes y estaciones de la extinta Policía Federal.
En la sala de operaciones se colocaron pantallas receptoras de cámaras de videovigilancia donde se monitoreaban los puntos estratégicos en todo el país, aeropuertos, carreteras federales, cruces fronterizos, entre otros, para labores de inteligencia.

A través de las pantallas de monitoreo se tenían enlaces con equipos de vigilancia aérea para, supuestamente, realizar el seguimiento de operativo que supuestamente se realizaban en vivo, cuando en realidad eran grabaciones a destiempo.
Para el presidente Andrés Manuel López Obrador, el búnker del que tanto había hablado fue el resultado de “mucha prepotencia (…) muchos excesos (…) demasiado extravagante, muy costoso, así, espectacular, como de película, nada más van a ver el túnel y es impresionante”.
El búnker cuenta con un túnel de 400 metros que conectaba directamente la oficina de la entonces Secretaría de Seguridad Pública con los tres pisos del centro de inteligencia, un túnel climatizado e iluminado las 24 horas del día que “ni el ‘Chapo’ Guzmán tenía”.