Son parte de una sociedad en crecimiento, asegura Jorge Aguilar Osorio
Chetumal (Marcrix Noticias)- Minimizan las manifestaciones que diversos grupos de la sociedad encabezaron a las afueras del Congreso del Estado en la instalación de la XVIII Legislatura en Chetumal, en donde arrojaron hasta huevos a diputados y sus invitados.
Jorge Aguilar Osorio, subsecretario de Derechos Humanos, dijo que todo es parte de una sociedad que crece, que aprende, que se manifiesta y en consecuencia hay que gobernar mejor para que disminuyan ese tipo de manifestaciones.
Declinó opinar sobre los casos de personas desparecidas en los cuales ya hay culpables en la cárcel, argumentando que las opiniones políticas terminan cuando inician los procesos jurídicos y compete únicamente a la Fiscalía y juzgados atender y emitir información de los casos.
Lamentó que los ciudadanos estén cerrando carreteras como medida de presión para resolver los asuntos y no esperen a que las autoridades hagan todo el proceso de investigación y dar con los responsables.
Se afectan a miles de personas con los cierres carreteros, acotó.
Sobre la queja de Madres Buscadoras y los colectivos Somos Tus Ojos y 9M, que Derechos Humanos de Quintana Roo no está funcionado, señaló que habría que revisar el tema y platicar con la titular del organismo y en consecuencia poder dar una opinión.
Durante la entrevista a medios de comunicación, Jorge Aguilar Osorio fue interrumpido por una madre buscadora, que le cuestionó sobre el caso particular de su hija, ante lo cual solo guardó silencio.
Indicó que el actual gobierno tiene las puertas abiertas a todos los grupos manifestantes, pero insistió que cuando casos particulares están en proceso jurídico, entonces se respeta lo que haga y determine esas instancias.
Cabe señalar que se dispuso de un amplio dispositivo de seguridad en el Palacio Legislativo de Quintana Roo, previo a la ceremonia de instalación de la XVIII Legislatura.
En medio de diversas protestas sociales, los nuevos diputados mandaron a colocar vallas metálicas que impiden el acceso al público en general, para solo dejarlo a los “invitados especiales”, de los diputados de la XVIII Legislatura.
