México envía 80 000 barriles de combustible a Cuba para mitigar apagones y crisis energética
La Habana. México despachó dos buques con 80 000 barriles de combustible hacia Cuba como apoyo para aliviar la grave crisis de apagones prolongados que afecta a amplias zonas de la isla
Estado de México. ( Marcrix Noticias).- La embarcación Ocean Mariner y el buque Eugenia Gas, ambos con bandera de Liberia, zarparon desde instalaciones del complejo Pajaritos de Petróleos Mexicanos (Pemex) hacia puertos cubanos con hidrocarburos destinados a la generación eléctrica. Según datos del Instituto de Energía de la Universidad de Texas, estas entregas llegan en un momento crítico para el sistema energético de la isla.
La situación energética en Cuba ha ido deteriorándose desde mediados de 2024 por la combinación de planta termoeléctricas obsoletas, averías técnicas y una marcada escasez de divisas para importar combustibles. En los últimos doce meses, el sistema eléctrico ha registrado cinco colapsos totales y múltiples fallas parciales, aumentando la dependencia de importaciones externas para mantener la generación básica de energía.
No obstante, estos 80 000 barriles representan apenas un poco más del déficit diario que enfrenta Cuba, que requiere alrededor de 110 000 barriles al día para cubrir sus necesidades energéticas básicas, de los cuales cerca del 60 % del combustible consumido es importado, según estadísticas oficiales.
Además de la ayuda mexicana, la crisis se ha visto exacerbada por una reducción generalizada de suministros desde aliados tradicionales como Venezuela, cuya participación en los envíos de combustible a Cuba ha disminuido considerablemente en 2025. Esta combinación ha contribuido a que las importaciones totales cayeran más de un tercio en los primeros diez meses del año en comparación con 2024, complicando aún más la posibilidad de aliviar los prolongados apagones.
La administración mexicana ha defendido estos envíos como un acto de solidaridad ante una emergencia humanitaria, aunque el volumen enviado es limitado frente a las necesidades reales de la isla. Para muchos cubanos, la llegada de este combustible representa un respiro temporal en una crisis que ha afectado severamente su vida diaria y la operación de servicios esenciales.