Máynez acusó que Carlos Manzo pidió ayuda reiteradamente a Claudia Sheinbaum y fue ignorado; denunció omisión de la SSPC y del Gobierno de México ante las advertencias públicas del edil asesinado.
Ciudad de México(Marcrix Noticias).- Jorge Álvarez Máynez denunció que el asesinato del alcalde independiente de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, pudo evitarse si el gobierno federal, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, hubiera atendido sus múltiples llamados de auxilio durante 2025. El edil, conocido como “El del Sombrero”, fue ejecutado a tiros la noche del 1 de noviembre durante el Festival de Velas, un evento público al que asistían cientos de ciudadanos.
En redes sociales, Máynez escribió: “Una y otra vez, Carlos Manzo alzó la voz para pedir ayuda del Gobierno de México. Hace más de un mes, en la Cámara de Diputados se hizo un llamado formal a atender sus solicitudes. No tendríamos que estar hoy lamentando su muerte”. El excandidato recordó que el alcalde solicitó refuerzos expresamente a Claudia Sheinbaum, sin que hubiera respuesta de su administración.
Manzo, quien enfrentó el avance de células del crimen organizado en Uruapan, había pedido en mayo el envío de fuerzas federales y el apoyo del entonces titular de Seguridad, Omar García Harfuch. En septiembre, canceló el Grito de Independencia advirtiendo que “no había garantías de seguridad”, y en octubre exigió que no se retirara a la Guardia Nacional que operaba temporalmente en la región. Ninguna de esas peticiones fue atendida por el gobierno federal.
“¿Por qué no atendieron su llamado en la SSPC México?”, cuestionó Máynez, refiriéndose directamente a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), que encabeza parte de la estrategia nacional de seguridad bajo instrucción de Sheinbaum. También recordó que la presidenta calificó públicamente como “equivocada” la estrategia del alcalde, quien criticaba el enfoque federal de “abrazos no balazos”.
“El gobierno permitió que Carlos Manzo fuera asesinado. Una y otra vez alzó la voz para pedir ayuda. Y muchos la alzamos con él. ¿Por qué no actuaron?”, concluyó Máynez.
Manzo fue atacado a balazos mientras se tomaba fotografías con menores de edad y otras familias durante el festival. Su escolta también murió en el lugar. Uno de los agresores fue abatido y dos más fueron detenidos. El crimen se suma a una lista creciente de alcaldes ejecutados en México en los últimos años, sobre todo en estados con fuerte presencia de cárteles como Michoacán.
Diversos actores políticos han señalado que la omisión federal en atender las denuncias del edil desnuda una grave falla en la protección de autoridades locales. Mientras el discurso federal insiste en el “Estado de Derecho”, el asesinato de Manzo vuelve a poner en duda la capacidad del gobierno para proteger a quienes combaten al crimen desde el territorio.