Natalia Popova, calificó la música tradicional como “ruido” en un video de TikTok, lo que generó indignación y fuertes críticas en redes sociales.

 

Ciudad de México (Marcrix Noticias).– Un nuevo caso de discriminación cultural se hizo viral en redes sociales luego de que la influencer de origen ruso Natalia Popova, residente en México desde hace seis años, publicara un video en TikTok en el que se burla de músicos que interpretaban huapango huasteco en un restaurante de la Ciudad de México.

En la grabación, Popova escribió: “Explíquenme por qué los músicos en CDMX consideran que esto es arte y esperan un pago por este ruido”, comentario que fue calificado como ofensivo y clasista por miles de usuarios. 

La reacción no se hizo esperar: en pocas horas el video desató una ola de críticas y reclamos en defensa de la música tradicional mexicana.

El huapango huasteco es un género representativo del folclor nacional, caracterizado por su riqueza lírica y la energía de sus interpretaciones. Para muchos, el desprecio mostrado por la influencer constituye una falta de respeto hacia una de las expresiones más arraigadas en la identidad cultural del país.

Ante la avalancha de críticas y mensajes que pedían su regreso a Rusia, Natalia Popova decidió primero eliminar el video y posteriormente poner privada su cuenta de TikTok. Sin embargo, el fragmento ya circula en distintas plataformas digitales, donde se mantiene el debate sobre respeto y diversidad cultural.

Popova, quien se presenta como artista visual y creadora de contenido, ha sido señalada por su actitud soberbia y su aparente desconocimiento del valor cultural de la música popular mexicana. 

Para muchos internautas, este caso recuerda al de “Lady Racista”, que hace unas semanas también fue expuesta por expresiones discriminatorias hacia los mexicanos.

El episodio ha reavivado la conversación sobre la gentrificación y la convivencia cultural en México, especialmente en la capital, donde la presencia de extranjeros en espacios públicos ha generado choques de percepciones y críticas hacia la forma de vida local.

A pesar de la polémica, usuarios resaltaron que la diversidad musical, lejos de ser motivo de burla, enriquece la identidad cultural del país y fortalece el orgullo de mantener vivas sus tradiciones.

Con información de Milenio y de medios.

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