Jaqueline Palmeros, activista mexicana y fundadora del Colectivo “Una Luz en el Camino” localizó los restos de su hija en la zona del Ajusco al sur de la CDMX
México (Marcrix Noticias)-“Te amo hija, con todo el dolor de mi corazón, debo decirte que cumplí con mi promesa”, escribió Jaqueline Palmeros en redes sociales el día que confirmó lo impensable: los restos de su hija Jael Monserrat Uribe Palmeros, desaparecida desde 2020, habían sido localizados en una zona boscosa del Ajusco.
El hallazgo fue posible gracias al trabajo conjunto con el colectivo de búsqueda “Una Luz en el Camino”, con el que Palmeros recorrió durante casi cinco años baldíos, sembradíos y barrancas en busca de Jael, quien desapareció cuando tenía 21 años.
Hallazgo en el Llano del Vidrio
Fue en noviembre de 2024, en el paraje conocido como Llano del Vidrio, donde Jaqueline y su colectivo encontraron un cráneo y una mandíbula. Dieron aviso inmediato a la Fiscalía General de Justicia de la CDMX (FGJ), que tras realizar análisis genéticos confirmó la identidad de Jael el 17 de enero de 2025.
El caso se suma a una larga lista de mujeres desaparecidas en esta zona de la ciudad, donde aún continúan las búsquedas de Ana Amelí García Gámez y Pamela Gallardo, también reportadas como desaparecidas en el Ajusco.
Feminicidio sin justicia
Jael Monserrat era recepcionista en un call center. Desapareció el 24 de julio de 2020, luego de subir a un vehículo gris en la colonia Apatlaco, en Iztapalapa, presuntamente rumbo a una entrevista de trabajo ofrecida por Adriana “N”, según la ficha de búsqueda.
Las investigaciones señalaron que Miguel “N”, pareja de Adriana, fue quien la recogió y la llevó hasta Eje 5 y Tlalpan, el último lugar donde se le vio con vida, según cámaras de vigilancia.
Aunque en un inicio fueron detenidos como presuntos responsables de desaparición y feminicidio, ambos fueron liberados en 2024 por falta de pruebas, dejando a Jaqueline sin justicia, pero no sin determinación.
Una lucha de amor y resistencia
Durante el funeral de su hija, Jaqueline Palmeros declaró:
“Nosotros la encontramos, nosotros la buscamos y con los recursos que teníamos la regresamos a casa”.
Su historia refleja la lucha incansable de miles de madres en México, que ante la inacción o lentitud de las autoridades, emprenden por su cuenta la búsqueda de sus hijas desaparecidas, muchas veces con resultados dolorosos pero necesarios para cerrar ciclos.