Cienfuegos fue acusado por Estados Unidos por vínculos con el narcotráfico en el gobierno de Peña Nieto.
En dos meses y once días, la Fiscalía General de la República (FGR) en México, concluyó que no había delito por el que perseguir al exsecretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, quien fue acusado por vínculos con el narcotráfico en Estados Unidos.
La reaparición pública del general Salvador Cienfuegos en la llamada Marcha de la Lealtad reavivó los cuestionamientos sobre por qué fue liberado luego de que Estados Unidos lo acusara en 2020 de presuntos vínculos con el narcotráfico.
La presidenta Claudia Sheinbaum y el fiscal general Alejandro Gertz Manero insistieron en la mañanera en que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no pidió detener el proceso penal contra quien fue el secretario de Defensa en el sexenio del priista Enrique Peña Nieto.
Según el fiscal Gertz, la justicia estadounidense desestimó el caso por falta de pruebas.
Sin embargo, hay evidencia de que el gobierno de López Obrador sí presionó políticamente para que el militar fuera devuelto a México.
Los fiscales estadounidenses insistieron hasta el último momento en que tenían fuertes evidencias para culpar al general Cienfuegos, según consta en el documento del 17 de noviembre de 2020 con el que pidieron a un juez estadounidense desestimar las acusaciones, para que el caso continuara siendo investigado en México.