A pocas horas del cierre del registro de candidaturas, el expresidente boliviano enfrenta trabas judiciales, desorganización partidaria y creciente presión política que complican su retorno al poder.

Bolivia (Marcrix Noticias)-A escasas horas de que concluya el plazo oficial para la inscripción de candidaturas en Bolivia, Evo Morales sufrió un nuevo revés político que prácticamente lo deja fuera de la carrera electoral. Su intento de registrarse a través del Partido Acción Nacional Boliviano (Pan-Bol) fracasó luego de que esta fuerza perdiera su personería jurídica por no alcanzar el mínimo legal de votos en las últimas elecciones.

La vocera de Morales, Wilma Alanoca, denunció que ni siquiera se le permitió el ingreso al Tribunal Supremo Electoral (TSE), que permanece custodiado por fuertes medidas de seguridad. Solo accedieron delegados previamente acreditados.

“Este es un golpe a la democracia. Nos ponen trabas de manera tramposa y no nos dejan ingresar”, declaró Alanoca frente a los medios.

El panorama de Morales ya era complicado desde que el Tribunal Constitucional emitió un fallo que prohíbe postular a un tercer mandato presidencial consecutivo, en consonancia con el artículo 168 de la Constitución boliviana. Pese a la decisión judicial, Morales había asegurado que pelearía en instancias legales y movilizaciones callejeras, acusando al presidente Luis Arce de estar detrás de un “complot judicial” para impedir su retorno.

El enfrentamiento entre Morales y Arce ha generado una fractura interna en el Movimiento al Socialismo (MAS). Morales perdió el liderazgo legal del partido tras una sentencia judicial en 2023, lo que dejó al MAS bajo control de sectores afines al gobierno de Arce. El actual presidente, por su parte, renunció a buscar la reelección y respalda ahora la candidatura de su exministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.

Mientras Morales permanece en el Chapare, su bastión cocalero, designó a Alanoca como su candidata vicepresidencial. Sin embargo, el exmandatario enfrenta una orden de arresto por negarse a declarar en un caso judicial vinculado al presunto abuso de una menor.

El clima político se ha tensado aún más en las afueras del TSE en La Paz, donde la policía reforzó la seguridad ante temores de disturbios similares a los del pasado viernes, que dejaron seis heridos y seis detenidos.

Ante la exclusión de Morales, líderes cocaleros y simpatizantes han anunciado protestas y advirtieron que, si no se le permite participar, “no habrá elecciones generales”.