El gobierno de Donald Trump, ordenó el envío de tropas, aviones y buques como parte de su estrategia para enfrentar a organizaciones criminales.
Washington D.C. (Marcrix Noticias).– Estados Unidos ordenó el despliegue de fuerzas aéreas y navales en el sur del mar Caribe, como parte de una nueva estrategia para combatir a los cárteles de la droga en América Latina, confirmaron dos fuentes del Pentágono a la agencia Reuters.
La medida, instruida por el presidente Donald Trump, busca atacar de forma directa a organizaciones criminales que su administración ha catalogado como “organizaciones terroristas”, entre ellas el Cártel de Sinaloa, el ‘Tren de Aragua’ y el cártel de Los Soles.
El diario The New York Times reveló que Trump, firmó en secreto una orden al Departamento de Defensa, para autorizar operaciones militares contra estos grupos, lo que abre la puerta a acciones en mar abierto y, potencialmente, en territorio extranjero.
Según el rotativo, esta es la decisión más agresiva en la campaña antidrogas de su gobierno.
El secretario de Estado, Marco Rubio, respaldó públicamente la directriz, destacando que la presencia militar se concentrará en el sur del Caribe, donde se considera que operan rutas clave del narcotráfico hacia Estados Unidos, especialmente de cocaína y fentanilo.
Además de México y Venezuela, la ofensiva busca presionar al gobierno de Nicolás Maduro, a quien Trump acusa de liderar el cártel de Los Soles y colaborar con otras redes criminales.
Washington ofreció una recompensa de 50 millones de dólares por información que lleve a su captura. La fiscal general estadounidense, Pam Bondi, aseguró que Maduro “es uno de los mayores narcotraficantes del mundo” y afirmó que la DEA ha decomisado 30 toneladas de cocaína vinculadas a su gobierno.
Venezuela rechazó la medida y acusó a Estados Unidos de amenazas de intervención militar. La vicepresidenta Delcy Rodríguez y el dirigente oficialista Diosdado Cabello, llamaron a la “unidad patriótica” y calificaron la acción como una “arremetida imperialista” para mantener el control del hemisferio.
De acuerdo con el Pentágono, el despliegue militar pretende “abordar las amenazas a la seguridad nacional de Estados Unidos, procedentes de organizaciones narcoterroristas en la región”.
Sin embargo, expertos advierten que la presencia de tropas, podría escalar las tensiones políticas y diplomáticas en el Caribe y América Latina.