Una nube de espuma blanca, generada por aguas negras contaminadas, cubre más de 100 metros de la carretera Alfajayucan-Chilcuautla
Una densa capa de espuma blanca, similar a una nube vista desde el aire o a residuos de jabón en tierra, cubre más de 100 metros de la carretera Alfajayucan-Chilcuautla, a la altura de la comunidad La Cañada, en el estado de Hidalgo.
Aunque parece inofensiva, autoridades y pobladores han confirmado que se trata de una espuma tóxica originada por aguas negras que bajan de la presa Rojo Gómez.
Juan Benítez Montes, vecino de la zona, explicó que la acumulación de basura impidió el flujo del agua contaminada, lo que intensificó la formación de espuma: “Se acumuló la basura y ya no pudo pasar la espuma. El agua viene muy sucia, se va haciendo como tipo jabón”. La sustancia, de aspecto blanco y ligero, es esparcida por el viento y bloquea el paso de vehículos, afectando a quienes transitan por la región.
El secretario general municipal de Alfajayucan, Víctor Alfonso Benítez Torres, advirtió que esta espuma representa un peligro para la salud: “Son químicos, son productos contaminantes. Si tú los tocas, te pueden afectar. Incluso al acercarse se siente como que pica, hasta da comezón”.
Las partículas pueden ser inhaladas o entrar en contacto con la piel, generando irritaciones y posibles daños mayores.
Las afectaciones a la movilidad también han sido severas. Un automóvil rojo tuvo que retroceder tras encontrarse con esta especie de pared espumosa, mientras decenas de pobladores deben duplicar sus tiempos de traslado para llegar a sus trabajos o escuelas. “Esta carretera ya transita mucho. Vienen maestros a trabajar desde temprano, pero ahorita está cerrada”, comentó nuevamente Juan Benítez.
A pesar de los intentos por limpiar el área, los vecinos afirman que las acciones no han sido efectivas, ya que la espuma continúa expandiéndose con la brisa. Según autoridades locales, cerca de 500 personas se ven directamente afectadas por la obstrucción del tramo carretero y la presencia de la sustancia tóxica.
Este fenómeno guarda similitud con lo ocurrido el pasado 22 de junio en Naucalpan, Estado de México, donde el desbordamiento del Río Verde tras intensas lluvias generó una espuma blanca que cubrió calles y avenidas. En aquella ocasión, el presidente municipal Isaac Montoya advirtió sobre los riesgos ambientales y de salud, ya que la espuma estaba compuesta por detergentes, residuos industriales, aguas negras y otros contaminantes.