Durante su visita a Cancún, la presidenta Claudia Sheinbaum dejó fuera a los verdaderos representantes indígenas, pese a que habían sido invitados al evento
Cancún, Quintana Roo – La presidenta Claudia Sheinbaum enfrentó críticas durante su visita a Cancún este domingo, luego de que un grupo de hombres y mujeres indígenas denunciara haber sido invitados a su informe, pero se les impidiera el acceso al evento. La situación ha desatado indignación en redes sociales y cuestionamientos sobre la verdadera inclusión de los pueblos originarios en la agenda política del gobierno federal.
Los afectados compartieron su frustración en redes sociales, donde destacaron que, aunque contaban con invitación formal, no se les permitió entrar al acto. “Hablan tanto de los indígenas y las mujeres, pero sus acciones muestran quiénes son en realidad”, escribió uno de los asistentes impedidos, reflejando la percepción de hipocresía que el incidente generó entre los observadores.
El evento buscaba resaltar logros y políticas de la administración federal en el sureste del país, una región con una amplia presencia de comunidades indígenas. Sin embargo, la exclusión de estos grupos contrasta con el discurso oficial de inclusión y apoyo a los pueblos originarios, dejando en evidencia una desconexión entre las palabras y las acciones de la presidencia.
Especialistas en temas indígenas señalan que la participación efectiva de estas comunidades en procesos políticos y eventos de alto perfil es esencial para garantizar la representación y el respeto a sus derechos. La exclusión en Cancún pone en evidencia que, a pesar de los discursos, aún persisten barreras que impiden su integración plena en la toma de decisiones.
Hasta el momento, ni la oficina de la presidencia ni las autoridades locales han emitido un pronunciamiento oficial que explique o justifique la negativa de acceso a los invitados indígenas, lo que mantiene abierta la controversia y aumenta la percepción de falta de congruencia en la política de inclusión del gobierno federal.