Los Blue Jays venció 6-1 a Los Dodgers y tomó ventaja 3-2 en la Serie Mundial.
Estados Unidos (Marcrix Noticias)-Los Toronto Blue Jays están a un juego de alcanzar la gloria. Con una noche perfecta desde la lomita de Trey Yesavage, la novena canadiense derrotó 6-1 a Los Angeles Dodgers en el Juego 5 de la Serie Mundial, colocándose 3-2 en la serie y muy cerca de conquistar su primer campeonato desde 1993.
A sus 22 años y 93 días, Yesavage escribió su nombre en los libros de historia al convertirse en el lanzador más joven en registrar más de 10 ponches en un juego del Clásico de Otoño, y el tercero más joven en cualquier duelo de postemporada, solo detrás de John Candelaria (1975) y él mismo en la ALDS 2025. Su actuación fue impecable: 12 ponches, cero boletos y apenas tres hits permitidos en siete entradas de dominio absoluto.
El poder ofensivo de Toronto se hizo sentir desde el primer turno. En la parte alta del primer inning, Davis Schneider y Vladimir Guerrero Jr. conectaron cuadrangulares consecutivos frente al abridor Blake Snell, un hecho sin precedentes en el arranque de una Serie Mundial y apenas la segunda ocasión que ocurre en toda la historia de la postemporada.
Los Dodgers reaccionaron en el tercer episodio con un jonrón solitario de Kiké Hernández, que acercó el marcador 2-1. Sin embargo, la respuesta canadiense no tardó: en la cuarta entrada, un elevado de sacrificio de Ernie Clement impulsó a Randal Varsho para ampliar la ventaja 3-1.
El juego se rompió definitivamente en el séptimo inning. Addison Barger, Andrés Giménez y Vladimir Guerrero Jr.aprovecharon el descontrol del bullpen angelino para producir tres carreras más, dejando la pizarra 6-1. Isiah Kiner-Falefa coronó la ofensiva con un sencillo que remolcó a Clement.
En los últimos episodios, los relevistas Seranthony Domínguez y Jeff Hoffman mantuvieron el dominio en la loma, cerrando el encuentro sin permitir más daño y asegurando el triunfo para Toronto.
Con esta victoria, los Blue Jays regresan a casa con la oportunidad de sellar el título en el Juego 6, programado para el viernes en el Rogers Centre, donde una ciudad entera sueña con volver a celebrar un campeonato tres décadas después.
