Por su ubicación geográfica y cercanía con la Línea Internacional de Cambio de Fecha, Oceanía se adelantó a América en la llegada del Año Nuevo 2026.
Australia (Marcrix Noticias).– Mientras en México y gran parte de América Latina aún se realizan los preparativos para la cena de Año Nuevo, el 2026 ya es una realidad en Oceanía, donde países como Australia, Nueva Zelanda y varias naciones insulares del Pacífico recibieron primero el nuevo ciclo, gracias a su ubicación geográfica cercana a la Línea Internacional de Cambio de Fecha.
El primer territorio del mundo en dar la bienvenida al 1 de enero de 2026 fue Kiribati o Isla de Navidad, específicamente la isla de Kiritimati, donde el cambio de año ocurrió cuando en el meridiano de Greenwich aún eran las 10:00 horas del 31 de diciembre.
Minutos después, el festejo se extendió a Samoa, Tonga, Fiyi y Tuvalu, seguidos por Nueva Zelanda, el primer país de gran tamaño en recibir el Año Nuevo, con un espectáculo de luces en Auckland.
Más tarde, Australia captó la atención mundial cuando Sídney celebró la llegada del 2026 con su tradicional show de fuegos artificiales sobre la bahía, convirtiéndose nuevamente en una de las primeras grandes ciudades del planeta en recibir el nuevo año, alrededor de las 13:00 horas GMT.
Miles de personas se congregaron para presenciar el espectáculo en el Harbour Bridge y la Ópera de Sídney, considerados símbolos globales de las celebraciones de Año Nuevo.

Este año, los festejos en Australia estuvieron marcados por medidas de seguridad reforzadas, luego del atentado registrado el pasado 14 de diciembre en la playa de Bondi, donde un ataque armado dejó 15 personas fallecidas.
Las celebraciones en ese punto turístico fueron suspendidas, mientras continúan las investigaciones por parte de las autoridades.
Conforme avanzaron las horas, el Año Nuevo comenzó a extenderse hacia Asia y Europa, siendo Rusia el primer país europeo en recibir el 2026, seguido posteriormente por el resto del continente.
En América, las celebraciones iniciarán más tarde en países como Argentina y Chile, y concluirán hasta llegar a Estados Unidos, específicamente en Hawái.
De manera curiosa, los últimos lugares en recibir el Año Nuevo se ubican cerca de donde comenzó el festejo: las islas Baker y Howland, territorios deshabitados de Estados Unidos en Oceanía.
En cuanto a zonas pobladas, Samoa Americana es el último territorio en dar la bienvenida al 1 de enero, casi 25 horas después de que Kiribati iniciara la celebración.
La diferencia horaria entre países se explica por la Línea Internacional de Cambio de Fecha, una línea imaginaria que divide el “hoy” del “mañana” en el océano Pacífico.
Esta línea, junto con ajustes históricos en los husos horarios, como el cambio realizado por Samoa en 2011, determina qué países son los primeros y los últimos en recibir cada nuevo año.
Fotos: AFP / EFE
