Absuelven a Daniel Arizmendi El Mochaorejas de una causa penal pero seguirá en prisión
Una jueza federal absolvió a Daniel Arizmendi López, conocido como El Mochaorejas, del delito de secuestro en una causa penal específica y ordenó su libertad por ese expediente; sin embargo, el sentenciado no abandonará la cárcel debido a que enfrenta otras condenas
Ciudad de México. ( Marcrix Noticias).- Una resolución judicial federal determinó absolver a Daniel Arizmendi López, El Mochaorejas, del delito de privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro dentro de una causa penal concreta, al considerar que las pruebas aportadas en ese expediente fueron insuficientes para sostener la acusación. La jueza ordenó su liberación únicamente respecto a ese proceso, al estimar además que la pena ya había sido compurgada con los años de reclusión acumulados.
Daniel Arizmendi fue uno de los secuestradores más notorios de México, conocido por encabezar una banda criminal que operó principalmente entre 1996 y 1998, periodo en el que cometió decenas de secuestros. Su apodo se originó por la mutilación de orejas a las víctimas como método de presión para exigir el pago de rescates a sus familiares, una práctica que generó conmoción nacional.
El hoy sentenciado fue detenido en agosto de 1998 en el Estado de México, tras un operativo policial que puso fin a una de las carreras delictivas más violentas de esa época. Desde entonces ha permanecido en distintos centros penitenciarios federales, acumulando múltiples sentencias derivadas de varios procesos judiciales.
Además del secuestro, a El Mochaorejas se le atribuyen delitos como delincuencia organizada, homicidio y portación de armas, lo que derivó en condenas que en conjunto suman varios cientos de años de prisión, aunque la legislación establece límites al tiempo efectivo de reclusión. Estas sentencias son las que actualmente impiden su salida del penal.
Las autoridades judiciales precisaron que la absolución reciente no implica su liberación total, ya que existen otros expedientes firmes y en trámite que mantienen vigente su reclusión. El caso ha reavivado el debate público sobre los procesos judiciales de alto impacto y la correcta integración de pruebas en delitos graves.
Con esta resolución, Daniel Arizmendi López queda libre únicamente de una causa penal específica, pero permanece tras las rejas, cerrando cualquier posibilidad inmediata de recuperar su libertad pese a la absolución dictada en este proceso.