La designación del fentanilo como arma de destrucción masiva fortalece facultades de Estados Unidos contra cárteles del narcotráfico.
Internacional (Marcrix Noticias) – La decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de clasificar el fentanilo como arma de destrucción masiva modifica el marco legal con el que ese país enfrenta al crimen organizado.
La medida no implica acciones militares inmediatas, pero sí otorga mayores facultades al Ejecutivo para actuar contra organizaciones criminales.
De acuerdo con especialistas en políticas públicas, la declaratoria amplía la capacidad de decisión del presidente estadounidense.
Esto le permite implementar acciones con menos restricciones constitucionales y mayor rapidez operativa.
El objetivo central es fortalecer la estrategia contra el tráfico de fentanilo, una sustancia que se ha convertido en un problema de seguridad nacional.
La designación busca impactar directamente a las estructuras que producen y distribuyen la droga.
Efectos del fentanilo como arma de destrucción masiva en los cárteles
El análisis señala que los principales afectados serían los grupos con mayor control del mercado.
Entre ellos destacan el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Ambas organizaciones concentran la producción y distribución de fentanilo y otras drogas sintéticas.
Además, funcionan como proveedores para células criminales más pequeñas en distintas regiones.
Dentro del Cártel de Sinaloa, las facciones de Los Chapitos y La Mayiza enfrentarían mayor presión.
También quedarían bajo observación los grupos aliados que dependen de su suministro.
Según el especialista consultado, estas estructuras deberán ajustar su operación ante un entorno más restrictivo.
Las consecuencias podrían reflejarse en bloqueos financieros y mayor vigilancia internacional.
Narrativas públicas como estrategia de contención
Una respuesta previsible de los grupos criminales sería reforzar estrategias de comunicación.
El objetivo sería deslindarse públicamente del tráfico de fentanilo.
Este tipo de acciones ya se observaron en 2023, cuando aparecieron mensajes que prohibían su producción.
Aquellas campañas no implicaron cambios reales en la operación criminal.
El negocio no se detendrá
A pesar de la designación, los especialistas descartan una reducción en el tráfico.
Las drogas sintéticas representan hoy el núcleo económico del narcotráfico.
El investigador explicó que el mercado se ha concentrado en estas sustancias por su alta rentabilidad.
Por ello, considera improbable que las organizaciones abandonen esta actividad.
Señaló que ninguna orden ejecutiva modificará una estructura económica consolidada.
Las organizaciones criminales han demostrado capacidad de adaptación constante.
El contexto interno en México
El análisis también apunta a un problema estructural dentro del país.
Persisten vínculos entre autoridades y grupos delictivos.
Mientras esa relación no se rompa, los resultados serán limitados.
El especialista advirtió que la frontera entre Estado y crimen sigue siendo difusa.
Concluyó que la presión internacional puede aumentar, pero no sustituye cambios internos.
La clasificación del fentanilo como arma de destrucción masiva incrementa el impacto, sin resolver el fondo del problema.