Rafael Ortega Montero, señaló que cientos de negocios han cerrado, las ventas cayeron hasta un 40% y la reforma de 40 horas podría acelerar el cierre de más empresas.
Cancún (Marcrix Noticias).– El panorama económico para las micro, pequeñas y medianas empresas se complica rumbo a 2026, advirtió Rafael Ortega Montero, representante de la CANACO, previo a la reunión de trabajo con el titular de la Unidad de Promoción Institucional de Nacional Financiera/Bancomext.
Señaló que el incremento de costos operativos, la falta de financiamiento accesible y la caída en ventas anticipan un escenario de despidos masivos el próximo año.
El líder empresarial destacó que en lo que va del año las ventas han disminuido entre 30 y 40 por ciento, lo que ha puesto en riesgo la viabilidad de cientos de negocios.
Tan sólo en el último periodo, dijo, se tiene registro de cerca de 500 cierres, una cifra que se acerca al total del año anterior, cuando 535 establecimientos dejaron de operar.
La mayoría corresponde a empresas pequeñas, principalmente abarrotes, tiendas de ropa y zapaterías, que no pueden competir con las grandes cadenas comerciales ni sostener los gastos de operación.
Ortega Montero explicó que las empresas recurren a créditos para sobrevivir, pero las tasas de interés en financieras privadas, alcanzan hasta 140%, lo que vuelve impagables los préstamos.
Por ello, la reunión con Nacional Financiera/Bancomext tiene como objetivo pedir que se faciliten líneas de crédito con menos requisitos y montos que van de 200 mil a 2 millones de pesos, suficientes para mantener a flote numerosos negocios.
Advirtió que, de continuar la presión económica, los empresarios se verán obligados a reducir personal. “Si tienes cinco empleados, vas a tener que quedarte con cuatro o tres”, expresó, al asegurar que esta tendencia se agudizará en 2026, cuando los ajustes fiscales y de seguridad social impacten aún más en los costos laborales.
Sobre la reforma laboral de las 40 horas, Ortega señaló que aplicarla de manera inmediata sería “materialmente imposible”, especialmente para los sectores turístico y comercial.
El representante de CANACO puntualizó que absorber de golpe la reducción de jornada quebraría a muchas empresas, por lo que respaldan que la implementación sea gradual, con una transición que concluya en 2030.
Indicó que los márgenes de utilidad actuales no permiten contratar más personal para cubrir las horas faltantes, y que incluso las grandes cadenas ya operan con plantillas más reducidas, apoyándose en proveedores, cajas automáticas y herramientas tecnológicas.
Ante el encarecimiento de insumos, la inflación acumulada y el alza de precios que afecta el consumo, el sector empresarial prevé que diciembre también cierre “muy abajo”, con pérdidas de hasta 40 por ciento respecto a años anteriores.
Ortega reiteró que los incrementos salariales no se reflejan en una mejora del poder adquisitivo. “Un jabón cuesta tres veces más que hace un año”, dijo, al ejemplificar cómo los costos superan los ingresos de las familias y afectan el consumo general.
Finalmente, advirtió que la crisis de 2026 podría ser una de las más severas para las pequeñas empresas, pues la combinación de inflación, carga fiscal, aumentos salariales y falta de acceso a créditos provocará una reducción significativa de empleos en el estado y en el país.
