Bajo un cielo despejado y en compañía de leyendas del ring, la presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la Clase Nacional de Boxeo, un evento multitudinario en el Zócalo capitalino que convirtió el deporte en un poderoso mensaje contra la violencia, las drogas y la desigualdad.

México (Marcrix Noticias)-El Zócalo capitalino vibró este domingo al ritmo de los jabs y rectos. En una mañana soleada, la presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la Clase Nacional de Boxeo, acompañada por leyendas del pugilismo mexicano y miles de personas vestidas de verde, blanco y rojo, formando un gigantesco mosaico con los colores de la bandera nacional.

En medio de aplausos y porras, el corazón político del país se transformó por unas horas en un gimnasio al aire libre. La clase masiva no solo fue una exhibición deportiva, sino una declaración colectiva a favor de la paz, la salud y la libertad.

“México construye paz, prosperidad y elige siempre ser un país libre, independiente y soberano”, expresó Sheinbaum, con guantes alzados, rodeada de excampeones mundiales. “El pueblo de México dice sí al deporte, sí a la educación, sí a la paz”, añadió, entre vítores de una multitud compuesta principalmente por jóvenes y familias completas.

La presidenta fue acompañada por figuras como el presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), José Sulaimán, quien aplaudió las palabras de la mandataria. “El boxeo nos hace más libres, más sanos y más felices”, subrayó Sheinbaum, en un discurso breve pero emotivo.

Brugada lanza “nocaut a la violencia”

La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, también tomó la palabra con energía. “¡Listos, listas! ¡Arrancamos la tercera edición de este evento histórico!”, exclamó. “Aquí hacemos un nocaut a la violencia”, añadió, mientras compartía el escenario con íconos del boxeo como Oscar de la Hoya, Rubén “El Púas” Olivares y Jackie Nava.

Mientras instructores dirigían las combinaciones básicas —jab, recto, gancho— la Plaza de la Constitución latía con fuerza, mostrando que el deporte no solo se trata de competencia, sino de disciplina, comunidad y transformación social.

Más allá del Zócalo: boxeo en todo México

La clase masiva fue replicada simultáneamente en diversas plazas públicas del país, llevando el mensaje de unidad y bienestar a cada rincón del territorio. En el Zócalo, se pudo ver a niños con guantes diminutos, adultos mayores moviéndose al ritmo de las combinaciones, y familias enteras participando activamente.

Al concluir, no hubo vencedores ni vencidos, sino un solo país que, a través del sudor, el esfuerzo y la convicción, reafirmó su compromiso con un futuro más sano y justo. Como bien lo resumió la presidenta Sheinbaum: “Como México no hay dos”.