El terremoto con epicentro en Birmania, dejó graves daños y el colapso de un rascacielos en Bangkok, mientras se declara estado de emergencia en varias regiones.
Tailandia (Marcrix, Noticias).- Un devastador terremoto de magnitud 7.7 sacudió este viernes Myanmar, extendiendo su impacto a Tailandia y el suroeste de China. Se reportan cientos de víctimas, mientras los equipos de rescate trabajan en la zona del desastre.
El epicentro del terremoto se ubicó a 16 kilómetros al norte de la ciudad birmana de Sagaing, cerca de Mandalay, la segunda ciudad más grande del país.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el sismo ocurrió a una profundidad de 10 kilómetros y fue seguido de una réplica de magnitud 6,4 en la misma zona.
Las autoridades han reportado graves daños en múltiples regiones. En Mandalay, los edificios se han derrumbado y los hospitales atienden a decenas de heridos.
Un rescatista en la zona describió la situación como “devastadora”, asegurando que el número de muertos podría contarse en cientos, aunque aún no hay cifras oficiales confirmadas.

El impacto del terremoto se extendió hasta Bangkok, la capital de Tailandia, donde un rascacielos en construcción colapsó, dejando atrapados al menos a 70 trabajadores. Equipos de emergencia trabajan contra el tiempo para rescatar a los sobrevivientes entre los escombros.
El pánico se apoderó de la ciudad, donde millas de personas evacuaron oficinas y comercios. Testigos reportaron que el suelo tembló violentamente por más de 30 segundos, causando grietas en diversas infraestructuras.

La junta militar que gobierna Myanmar ha declarado el estado de emergencia en seis regiones del país, incluyendo Sagaing, Mandalay, Magway, Bago, el estado de Shan Oriental y Naipyidó.
Las carreteras en la capital han sufrido daños significativos y los hospitales locales están al límite de su capacidad.

En China, el terremoto se sintió en la provincia de Yunnan, donde las autoridades evalúan posibles daños. El riesgo de nuevas réplicas mantiene en alerta a la población, mientras continúan las labores de rescate.
La comunidad internacional sigue atenta a la evolución de la catástrofe y al balance final de víctimas y daños materiales.


