A pesar de sus vínculos con el narcotráfico, gozaba de protección política gracias a su familia, integrantes del Partido Sinaloense (PAS).
Sinaloa (Marcrix Noticias)-Martín García Corrales, alias “El Tano” o “Cachuchas,” fue asesinado junto con su hermano José Ricardo y un tercer hombre aún no identificado, el pasado 17 de agosto en una brecha que conecta el poblado de Conitaca con la Carretera Internacional México 15, en el municipio de Elota, Sinaloa. Este municipio, ubicado a unos 100 kilómetros al sur de Culiacán, es conocido por su baja población, de aproximadamente 55,000 habitantes.
García Corrales, un importante operador del Cártel de Sinaloa, estaba ligado a Ismael “El Mayo” Zambada y a “Los Chapitos,” hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán. Según informes del gobierno estadounidense, García Corrales supervisaba varios aspectos del tráfico de fentanilo para el cártel, incluida la seguridad y la compra de armas. La DEA había ofrecido una recompensa de 4 millones de dólares por su captura.
El asesinato de Martín y su hermano se produjo mientras se dirigían a Texas, acompañados por Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”. Esta operación, en la que García fue traicionado y asesinado, ha generado especulaciones sobre un posible conflicto interno dentro del cártel.
A pesar de los señalamientos y su implicación en actividades delictivas, la familia de Martín García Corrales tiene un fuerte respaldo político en Sinaloa. Su hermana, Sonia Estela García Corrales, es la líder municipal del Partido Sinaloense (PAS) en Elota, y otros parientes cercanos ocupan posiciones clave en la estructura del partido. El PAS, fundado por Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien fue asesinado en julio, expresó públicamente sus condolencias por la muerte de los hermanos.
El partido lamentó en redes sociales el fallecimiento de los hermanos, expresando su pesar por la pérdida de Martín y José Ricardo García Corrales, hermanos de su presidenta municipal, Sonia Estela García Corrales.
