Al menos el 30% de las mujeres sufren violencia económica debido a roles machistas y control del gasto dentro del matrimonio
Chetumal (Marcrix Noticias)-En Quintana Roo, un alarmante 30% de las mujeres experimentan violencia económica, resultado de roles tradicionales y machistas en el matrimonio que permiten a los hombres controlar los gastos del hogar. Brenda Martínez, defensora de los Derechos de la Mujer, destaca los progresos en las leyes de materia familiar que aseguran la compensación de las mujeres por su trabajo doméstico en caso de separación.
Martínez explica que, aunque una mujer no participe activamente en el mercado laboral, su labor como ama de casa, en el cuidado de los hijos, y en las tareas domésticas es igualmente valiosa y debe ser considerada al momento de dividir los ingresos del hogar en una separación. “La violencia económica está estrechamente ligada a la violencia patrimonial; ambas afectan gravemente a las mujeres. Sin embargo, hoy en día existen avances significativos en estos temas”, señala la defensora.
En los casos donde la mujer no tiene un ingreso económico pero contribuye con una gran cantidad de trabajo no remunerado en el hogar, este trabajo puede ser compensado legalmente. Martínez aclara que el argumento de que el hombre aporta el 100% de la economía al hogar es incorrecto, ya que la mujer contribuye con la otra mitad mediante sus labores domésticas.
En el caso de separación, si la mujer no tuvo la oportunidad de trabajar debido a las responsabilidades del hogar, puede solicitar una pensión compensatoria. Esta pensión busca equilibrar la desventaja económica resultante de no haber trabajado durante el matrimonio, asegurando que no quede en desamparo.
La Encuesta Nacional sobre Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) revela que en Quintana Roo, el 32.5% de los matrimonios tienen al hombre como controlador de los ingresos familiares, y al menos el 70% de las mujeres en el estado han experimentado algún tipo de violencia. Esto subraya la necesidad de seguir avanzando en la protección y compensación de las mujeres afectadas por la violencia económica.